• Inauguró el XLIV Coloquio Internacional de Historia del Arte “El giro material”, que desde hoy y hasta el viernes reúne a destacados ponentes nacionales y extranjeros.

Por: Redacción/

En la Universidad Nacional el conocimiento no se detiene, se sigue trabajando y se mantiene el compromiso con la sociedad, afirmó el rector Enrique Graue Wiechers al inaugurar el XLIV Coloquio Internacional de Historia del Arte “El giro material”, que desde hoy y hasta el viernes reúne a destacados ponentes nacionales y extranjeros para indagar en el objeto artístico, sus materiales y las percepciones e interpretaciones hechas a lo largo de la historia.

Este encuentro diverso y los resultados de las investigaciones del Instituto de Investigaciones Estéticas (IIEs), son ejemplo de que “el intercambio de ideas y conocimientos que se dará en los siguientes días será muy benéfico”, expresó el rector en la ceremonia virtual.

En tanto, la coordinadora de Humanidades de la UNAM, Guadalupe Valencia García, destacó que en estos tiempos de confinamiento se evidencia la importancia que tienen las expresiones artísticas y culturales en la vida cotidiana de las personas.

“Mientras navegamos entre la necesidad o resistencia a adaptarnos y la búsqueda de alternativas, es vital que continuemos nutriendo nuestros espacios de reflexión, tan imprescindibles”, dijo.

En el actual contexto, plagado de paradojas, se ha creado también un terreno fértil para resignificar nuestra mirada y dotar al pensamiento teórico de las problemáticas estéticas y culturales, de nuevas preguntas que lo provocan y lo retroalimentan, agregó.

Por ello, Valencia celebró que el Instituto mantenga la tradición del Coloquio, y confió en que en éste se renovarán sus reflexiones y debates.

En su oportunidad, el director del IIEs, Iván Ruiz, indicó que las llamadas ciencias duras ofrecen a la historia del arte y a los trabajos de conservación y restauración el análisis material de las obras y los objetos culturales, que son “el giro material” motivo de este evento.

Introduce tensiones entre aspectos objetivos y subjetivos que se encuentran en la raíz de los procesos creativos. Y agregó: “Se trata, más bien, de enriquecer nuestras proposiciones teóricas, afinar las metodologías de estudio, y de generar un trabajo realmente transdisciplinario en el umbral entre arte y ciencia”.

Hoy en día, al recorrer las salas de museos de arte es posible encontrar, junto a las obras emblemáticas, resultados de análisis científicos que polemizan o abiertamente contradicen los conocimientos históricos previos.

“Del deleite de la vista hemos pasado al franco conocimiento científico; sin embargo, las obras de arte siempre nos tendrán una fuente inagotable de expresividad y simbolismo que es lo que nos anima a continuar nuestra tarea como historiadores del arte”, concluyó.

Entre los ponentes destacan investigadores de la UNAM como María Teresa Uriarte y Renato González Mello; de instituciones extranjeras Gabriela Siracusano, directora del Centro de Investigación en Arte, Materia y Cultura, de la Universidad Nacional de Tres de Febrero, Argentina; y Thomas Cummins, del Departamento de Historia del Arte y Arquitectura de la Universidad de Harvard, Estados Unidos.