Por: Redacción/
Además de ampliar la cobertura en la atención médica a los sectores más vulnerables, el replanteamiento del modelo nacional de salud debe incluir, como prioridad, el combate a la corrupción en la compra de medicamentos y el saneamiento de las instituciones públicas del sector.
Así se destacó en un encuentro entre integrantes de la Comisión de Salud, que preside el senador Miguel Ángel Navarro Quintero, y los secretarios del ramo en Guerrero, Quintana Roo, Tabasco y Chiapas, donde intercambiaron puntos de vista sobre la propuesta del Ejecutivo Federal para transformar el sistema de salud pública.
Navarro Quintero explicó que los cambios planteados por el Presidente de la República tienen el objetivo de brindar atención y medicamentos gratuitos, particularmente a la población más vulnerable que no cuenta con acceso a la seguridad social.
En breve, aseguró el legislador, la Cámara de Senadores iniciará la discusión sobre este modelo y es necesario establecer comunicación estrecha con los secretarios de Salud de los estados, la Cámara de Diputados y el Poder Ejecutivo Federal, a fin de construir una propuesta que satisfaga las demandas de los ciudadanos.
Para el senador Américo Villarreal Anaya, del Grupo Parlamentario de Morena, expresó que las instituciones de salud “también están enfermas y tenemos que hacer un diagnóstico adecuado para curarlas”, desde el punto de vista de los recursos humanos, pero también del abasto de medicamentos e insumos y la innovación de la infraestructura médica.
Juan Manuel Fócil Pérez, senador del Grupo Parlamentario de Morena, consideró que también hace falta “poner en orden a los sindicatos”, particularmente en los estados, “para que podamos hacer una utilización eficiente del recurso humanos” en el sistema de salud.
Señaló que “la corrupción nos ha dañado mucho en la compra de medicinas”, ha generado el robo de medicamentos y provocado que algunos profesionales de la salud comercien con la atención que por obligación tienen que brindar.
Por eso, asentó, “sí vale la pena hacer un replanteamiento de todo y ver de qué manera podemos mejorar el sistema en cada estado”, acotó.
Carlos de la Peña Pintos, secretario de Salud de Guerrero, dijo que “hay mucha concordancia con la propuesta del nuevo gobierno para ampliar la atención” a los sectores más vulnerables, pero es indispensable una estrategia para establecer centros de salud intermunicipales, que atiendan a la población de localidades alejadas, de cien, 200, 300 o 500 habitantes.
La secretaria de Salud de Quintana Roo, Alejandra Aguirre Crespo, dijo que también se requiere hacer un diagnóstico detallado sobre las necesidades, componentes y grupos vulnerables de cada estado, así como un presupuesto basado en resultados y con perspectiva de género. Esto es muy importante para disminuir las brechas de desigualdad en el sector, asentó.
Silvia Roldán Fernández, secretaria de Salud de Tabasco, advirtió que se tiene que contemplar el panorama epidemiológico de nuestro país. “Todavía no salimos de las enfermedades infectocontagiosas como las diarreas, y ya enfrentamos padecimientos crónico-degenerativos.
Por último, José Manuel Cruz Castellanos subrayó el déficit que, en el sector, presentan algunas entidades. En el caso de Chipas, agregó el titular de Salud de ese estado, se crearon alrededor de siete mil 400 plazas, sin fuente de financiamiento, que representan dos mil 800 millones de pesos para este año.
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