Por. Redacción/

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y su Relatoría Especial para la Libertad de Expresión (RELE/CIDH), reunida en su 168 Periodo de Sesiones en Republica Dominicana, recuerda su condena respecto al brutal asesinato de los periodistas ecuatorianos Javier Ortega y Paúl Rivas Bravo y del trabajador del mismo medio Efraín Segarra en una zona indeterminada entre la frontera entre Ecuador y Colombia. En ese sentido, instan a las autoridades de los respectivos países a continuar trabajando a fin de identificar y sancionar a los responsables del crimen, y a continuar sus esfuerzos con el objeto de facilitar la entrega de los cuerpos a sus familias.

La Comisión Interamericana había otorgado medidas cautelares a favor de Javier Ortega Reyes, Paúl Rivas Bravo y Efraín Segarra Abril. En la referida decisión, solicitó a los Estados que informasen sobre las acciones adoptadas a fin de investigar los hechos.

Dentro de los plazos otorgados en la primera comunicación, la CIDH recibió información por parte de ambos Estados sobre las gestiones emprendidas respecto a los secuestros y la confirmación oficial sobre el asesinato de todos los integrantes del equipo periodístico. Asimismo, recibió información por parte de los representantes de los familiares de las víctimas sobre la evolución de los acontecimientos. En la misma comunicación, los familiares solicitaron la creación de un Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI).

Paralelamente, el Presidente de Ecuador a través de dos comunicaciones de la Ministra de Relaciones Exteriores informó que al mantener un marco del diálogo con los familiares decidió conformar un mecanismo internacional y estimó particularmente importante el rol de la CIDH y su participación en el mismo. Sobre estos planteamientos, la Comisión agradece el reconocimiento y la invitación del Estado para construir algún tipo de mecanismo internacional.

La CIDH ha evaluado la propuesta del Estado de Ecuador y ha decidido conformar un equipo de seguimiento con atención especial y diferenciada en el marco de su medida cautelar. La Comisionada Esmeralda Arosemena de Troitiño, Relatora de la CIDH para Ecuador, será la responsable del mismo, con el apoyo del Secretario Ejecutivo de la CIDH o de quien él designe, así como del equipo técnico de la sección de medidas cautelares y el Relator Especial de Libertad de Expresión.

Dentro del mandato de la CIDH, el equipo de seguimiento especial se dedicará a acompañar a los familiares de las víctimas y apoyar técnicamente las investigaciones mantenidas por las autoridades e instituciones nacionales. Este equipo funcionará hasta fin de año.

La CIDH convocará inmediatamente una reunión de trabajo involucrando a los representantes del Estado de Ecuador y de los familiares y peticionarios de la medida cautelar, con lo cual empezará de inmediato el funcionamiento del equipo especial de seguimiento.

“La CIDH reitera su disposición a colaborar con el cumplimiento de las obligaciones internacionales del Estado y a fin de garantizar el derecho al acceso a la justicia de las víctimas”, dijo la Comisionada Esmeralda Arosemena de Troitiño.

La Relatoría Especial también informa que ha recibido la invitación del Estado ecuatoriano para realizar una visita de trabajo a fin de constatar el cumplimiento de Ecuador con las obligaciones internacionales en materia de promoción y protección del derecho a la libertad de expresión.

“Reconozco y agradezco la invitación extendida por Ecuador y estaré informando en el transcurso de los próximos días las fechas para la realización de la visita. La misma será también una oportunidad propicia para dar seguimiento al presente caso”, dijo el Relator Especial para la Libertad de Expresión, Edison Lanza.

La CIDH es un órgano principal y autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA), cuyo mandato surge de la Carta de la OEA y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. La Comisión Interamericana tiene el mandato de promover la observancia y la defensa de los derechos humanos en la región y actúa como órgano consultivo de la OEA en la materia. La CIDH está integrada por siete miembros independientes que son elegidos por la Asamblea General de la OEA a título personal, y no representan sus países de origen o residencia.