Por. Redacción/

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) saluda la decisión del Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil, que autorizó la alteración de los registros civiles de nacimiento de las personas trans a través de la auto declaración sin la necesidad de realización previa de intervención quirúrgica, los informes médicos o psicológicos, o incluso de decisión judicial. El fallo representa un avance significativo en la garantía de los derechos de las personas trans en el país, en especial al reconocimiento de la identidad de género, respetando los estándares interamericanos de derechos humanos.

La Comisión Interamericana recibió la información de que la Corte Suprema brasileña reconoció el derecho a la alteración del nombre y prenombre de las personas trans en los registros de civiles del país a través de la auto declaración, sin la necesidad de decisión judicial, médica o psicológica y sin la necesidad de realizarse una cirugía de afirmación sexual. Según la información recibida, los ministros del STF tomaron en consideración el derecho a la dignidad y el derecho a autoafirmación, reconociendo el derecho a la identidad de las personas trans de acuerdo con la auto identificación. En ese mismo sentido, la CIDH aún resalta los impactos positivos de dicha decisión, que, conforme a la noticia recibida, ya será aplicada por el Tribunal Superior Electoral del Estado en sus futuros procesos electorales.

La Comisión Interamericana resalta que el derecho a la identidad es un factor constitutivo de la personalidad humana y la ausencia de su reconocimiento impacta directamente en el goce integral de los derechos humanos de las personas trans. La implementación de mecanismos legales que reconocen el acceso a la documentación de acuerdo con la identidad de género tiene un impacto positivo en la vida de las personas trans. Sin embargo, la Comisión subraya que, a pesar de la importancia de estos reglamentos y de los esfuerzos realizados por varios Estados de la región para implementarlos, su mera existencia no resuelve o garantiza a las personas trans la protección integral de sus derechos humanos.

La Comisión saluda la decisión del Supremo Tribunal brasileño y llama a todos los Estados de la región a adoptar leyes y políticas amplias y transparentes que se destinen a reconocer la identidad de género, así como garantías jurídicas y sociales que promuevan el respeto a todos los derechos humanos a las personas trans, incluyendo su autonomía corporal.

La CIDH es un órgano principal y autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA), cuyo mandato surge de la Carta de la OEA y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. La Comisión Interamericana tiene el mandato de promover la observancia y la defensa de los derechos humanos en la región y actúa como órgano consultivo de la OEA en la materia. La CIDH está integrada por siete miembros independientes que son elegidos por la Asamblea General de la OEA a título personal, y no representan sus países de origen o residencia.