Por: Javier Bárcenas
El presidente de la Cámara de Diputados, el diputado panista Javier Bolaños, dijo que el proyecto de presupuesto 2017, ni lo califican a priori, ni se garantiza el aval, sino se antepondrá la preeminencia del interés nacional para construir la mejor herramienta económica para el país.
Al recibir el paquete del presupuesto económico 2017 que envió el Ejecutivo federal, el presidente de la Mesa Directiva señaló que se abrirán los debates, la exposición de propuestas de modificación o de proyectos complementarios, exponiendo con claridad argumentos y fortaleciendo los canales de diálogo institucional entre poderes.
Dijo que las discusiones en la Cámara iniciarán con establecer con claridad el origen y las expectativas del ingreso, sin incremento en las tributaciones ya establecidas, ni generando nuevos impuestos, seguido de la correspondiente revisión y aprobación del Senado de la República. “Entonces pasaremos al análisis y deliberación del gasto”.
Javier Bolaños mencionó que los temas como salud, el crecimiento económico, la educación, la seguridad, la generación de empleos, la atención urgente a grupos vulnerables, el combate a la pobreza, son apenas algunas de las prioridades que sin duda están ya inscritas en las agendas de los diferentes grupos parlamentarios y del propio diputado independiente.
Reiteró que ante los dislates del candidato republicano de vecino del norte, Donald Trump, que quede claro: “No aprobaremos ni un solo peso para la mencionada construcción de un muro. Para nosotros, para la Cámara de Diputaos es asunto concluido”.
Los temas se centrarán en la revisión de las áreas que serán impactadas por los recortes anunciados, deteniendo aquello que pudiera vulnerar aún más a las clases desprotegidas y las áreas de alta sensibilidad.
El presidente manifestó que lo dicho por distintos pensadores políticos en todas las épocas: “en la vida, y sobre todo en la política, las ocasiones son fugaces, las oportunidades son efímeras. En su caso señor secretario, tiene usted el inmenso reto de servir a México, en un momento ciertamente muy complicado”.
Mencionó que a pesar del incremento de mexicanos inscritos como contribuyentes en el SAT, y el registro de una mayor recaudación, esto no se ha reflejado en el resto de los indicadores de las finanzas públicas.
Sin embargo, es, sin duda, también una gran oportunidad. Una oportunidad para revisar y corregir todo aquello que de la política económica no ha dado los resultados esperados.
Los compromisos fundamentales son inyectar confianza al desempeño y conducción de la política económica, a ejercer con equilibrio sus atribuciones, a cumplir los objetivos de evitar déficit e inflación y disminuir la deuda pública que ha alcanzado cifras que preocupan, como lo dice el Gobernador del Banco de México.
“Requerimos austeridad y escrupuloso manejo de los dineros del pueblo, y a su vez estricta rendición de cuentas. Magna tarea en el último tercer tramo del actual gobierno que, como la historia nos ha enseñado, siempre es el más difícil”.
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