Por: Redacción/
El pie diabético es una de las causas principales de morbimortalidad entre pacientes afectados por la diabetes mellitus, cuyas lesiones constituyen entre 20 y 30 por ciento de internamientos con estancia hospitalaria prolongada en el mundo, afirmó la doctora Tessy María López Goerne, académica de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
En el 1er Coloquio en torno a la diabetes. Crisis socioculturales y emergencias médicas, la investigadora expuso vía Skype que cada 30 segundos alguien pierde una extremidad por dicho padecimiento y siete de cada diez amputaciones de pierna ocurren por la misma causa.
Entre 40 y 70 por ciento de la pérdida de extremidades inferiores está asociada al exceso de azúcar en la sangre y 85 por ciento está precedido por una úlcera en el pie.
Esta patología puede prevenirse y tratarse con éxito mediante la aplicación del NanoGel, nanomedicamento que la académica desarrolló para desinfectar, oxigenar y cicatrizar heridas difíciles de cerrar y que desde hace tres años está accesible a la población por una cuota de recuperación.
El producto se aplica en el área afectada después una rigurosa limpieza para que las nanopartículas en forma de gel actúen sobre los virus y las bacterias, alcanzando óptimos resultados sin efectos secundarios.
La doctora López Goerne aseveró que la nanomedicina es el tratamiento y la medicina del siglo XXI y para su desarrollo no requiere de grandes recursos, pero sí de la conjunción de los conocimientos sobre biología, medicina, química, ingeniería, matemática y física, entre otras disciplinas.
La nanomedicina es una rama de la nanotecnología que se especializa en el desarrollo de tratamientos, instrumentos, estructuras, dispositivos y fármacos de dimensiones nanométricas con un alto grado de precisión que combaten virus y bacterias.
Al dar lectura a la conferencia plenaria Acceso a la atención y tratamiento del pie diabético con nanotecnología de López Goerne, su asistente, la doctora Paula Díaz Ruiz, definió al NanoGel como un antiséptico cicatrizante utilizado para el tratamiento de heridas infectadas y de difícil curación como pie diabético, úlceras varicosas y por presión, llagas, lesiones quirúrgicas, abscesos, infecciones en la piel y conejeras.
“El pie diabético es cualquier lesión que se localiza por debajo del maléolo en un paciente que tiene diabetes mellitus”, trastorno que “en 2015 registró 415 millones de personas a nivel mundial y que para 2040 ascenderá a 642 millones”, en un panorama donde “una de cada dos personas no sabe que la padece”.
Es una de “las principales causas de mortalidad a nivel nacional considerando que es un padecimiento crónico que conlleve a múltiples complicaciones de forma multiorgánica y en la piel”.
La especialista en terapia, heridas, estomas y quemaduras expuso que en la incidencia de ese problema entre uno a cuatro por ciento de los pacientes con hiperglucemia presenta pie diabético, pero la probabilidad se incrementa si tiene neuropatía diabética.
La prevalencia anual en México es de 5.3 a 10 por ciento y afecta principalmente a adultos entre 45 y 60 años. Una de cada tres personas que ha tenido alguna lesión o que le han amputado algún miembro es muy probable que desarrolle otra en la extremidad opuesta, por lo tanto lo más importante “es la prevención, no esperar a presentar alguna lesión para acudir al médico”.
Los factores de riesgo para desarrollar pie diabético son: la neuropatía diabética, enfermedad vascular periférica, ulceración previa en los pies, mal control de una glucemia, diabetes mellitus de larga duración, tabaquismo, nefropatía y la edad.
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