Desde el año 2012, 10 estados concentran el 82% de los plagios: asociación Alto al secuestro
“Las cifras oficiales no reflejan el secuestro en el país”: Wallace
Por Omar Marroquín
El secuestro en México aumentó en junio y lo colocó como el mes con más personas plagiadas en lo que va del año 2015, informó la asociación Alto al secuestro. Tan solo en el mes pasado se registraron 216 víctimas de plagio –en promedio, siete personas por día–, cifra que representa un aumento del 28 por ciento en comparación con las 180 víctimas reportadas en mayo.
En conferencia de prensa, Isabel Miranda Wallace, presidenta de la asociación, detalló las cifras y estadísticas que han recopilado durante el primer semestre de este año y que muestran un panorama diferente al presentado por la Comisión Nacional Antisecuestro. “Las cifras oficiales no reflejan el secuestro en el país” puntualizó.
De enero a junio, mil 117 personas fueron víctimas de secuestro, lo que en promedio se traduciría en 186 víctimas cada mes. En el mismo periodo de tiempo, las autoridades federales y locales detuvieron a mil 64 personas por este delito.
Los municipios más afectados por este delito desde el principio del año son Ecatepec con 177 secuestros, Acapulco con 160, Cuernavaca con 138, Ciudad Victoria con 126 y Nezahualcóyotl con 125.
De acuerdo con el informe de secuestro de esta asociación civil, en junio las entidades federativas que concentraron la mayor cantidad de plagios fueron el Estado de México con 37 casos, Tamaulipas con 32, Veracruz con 13, el Distrito Federal con 14 y Guerrero con 17 al igual que Tabasco.
Por el contrario, los estados donde no se reportaron casos de secuestro fueron Baja California Sur, Colima, Guanajuato, Nayarit y Yucatán.
El conteo desde la administración priísta
El conteo de plagios no se limita al año 2015. Desde el primer día en que Enrique Peña Nieto asumió el poder como Ejecutivo federal, Alto al secuestro comenzó a recopilar cifras que evidencian la disminución y repunte de casos a lo largo del país.
De diciembre de 2012 a junio del año en curso se denunciaron 6 mil 27 secuestros, lo que se traduciría en un promedio de seis secuestros por día.
Febrero del año pasado se posicionó como el mes con más incidentes al registrar 310 plagios, es decir, más de 30 secuestros por día. En contraste, con solo 128 plagios, marzo de este año registró la disminución más significativa desde que inició la administración del presidente Enrique Peña Nieto.
El perfil de víctimas de secuestro elaborado por la asociación de Wallace coloca a los hombres –que representan el 72 por ciento del total de plagiados – de entre 21 y 30 años como el grupo de mayor vulnerabilidad.
En lo que respecta a la distribución de los incidentes, el Estado de México, Tamaulipas, Guerrero, Morelos, Veracruz, Michoacán, Tabasco, Jalisco, Oaxaca y el Distrito Federal concentraron el 82% del total de denuncias de secuestro en el país.
El caso más grave es el Estado de México que registró mil 390 secuestros en los últimos tres años.
Disfrazar los secuestros
Aunque en mayo el coordinador nacional antisecuestros, Renato Sales Heredia, declaró que las cifras del organismo a su cargo se homologaron con las de esta organización civil y otras similares, algunas cifras de Alto al secuestro son diferentes a las presentadas por el Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP).
El SNSP documentó que de enero a mayo en México hubo 395 secuestros, mientras que Alto al Secuestro registró 566 plagios en el mismo periodo de tiempo.
“Hoy nos encontramos con algo verdaderamente alarmante: están incurriéndose secuestros en un rubro llamado privación ilegal de la libertad, algo sumamente grave. Están disfrazando los secuestros que realmente se comenten” dijo enfática Wallace.
Entre los años 2010 y 2015, Alto al secuestro documentó 9 mil 952 privaciones ilegales de la libertad en siete estados de México.
Para la asociación, el número de incidentes del SNSP no reflejan la realidad del secuestro en México, y la explicación de la disparidad entre ambas cifras radica en la aplicación de los códigos penales estatales.
Tipificar el secuestro como privación ilegal de la libertad, argumentó Wallace, además de disfrazar el número de plagios, dificulta la impartición de justicia. La privación ilegal de la libertad no se considera como delito grave en varias entidades federativas, su pena máxima oscila entre los dos y siete años de prisión, mientras que la ley general en materia de secuestro estipula que éste delito se castiga con hasta 80 años de cárcel.
Un ejemplo de estas prácticas fueron las 16 privaciones ilegales de libertad que ocurrieron entre el 9 y 14 de mayo en Chilapa, Guerrero, las cuales no fueron investigadas por la Procuraduría de Justicia del Estado debido a que –después de una jornada violenta en ese municipio– nunca se pidió el rescate de los desaparecidos.
En aquella ocasión, Renato Sales Heredia informó que no había elementos suficientes para considerar o descartar estos casos de desaparición como secuestros.
“No tenemos hasta el momento la notificación de que se haya solicitado algún rescate, cuando es un secuestro extorsivo es específicamente cuando hay esta solicitud de rescate”, explicó en rueda de prensa.
La investigación de la asociación señaló a las Fiscalías de Chiapas, Guerrero, Jalisco, Estado de México, Distrito Federal, Nuevo León y Zacatecas como órganos de investigación delincuencial que incurren en esta práctica.
Frente a este panorama Alto Al Secuestro no sólo exigió a los órganos de procuración de justicia del país que reporten al SNSP los delitos de privación ilegal de la libertad como secuestros, también calificó de ilegales las legislaciones estatales que todavía tipifican este delito como privación ilegal de la libertad, por lo que urgió su derogación para que se respete y aplique la Ley General para Prevenir y Sancionar Delitos en Materia de Secuestro.
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