Por: Redacción/
La habilidad para componer música ya no será privilegio de algunos, sino que podrá ser una realidad al acceso de todos gracias a un sistema computacional creado por la doctora en Ciencias de la Computación Maya Ackerman.
Alysia es un sistema basado en datos de un gran listado de canciones del cual, mediante la inteligencia artificial, “aprende y trata de averiguar cómo arreglar melodías basadas en temas pre-programados”. Este sistema creativo humano-computadora puede generar canciones completas u ofrecer una amplia variedad de opciones para producir música.
“El ordenador puede ser un colaborador muy cercano, igual que un humano que participa con otro en la creación de canciones y no ser sólo una herramienta”; entre ambos –humano y computadora– se genera un proceso participativo de creación.
En el 12 Coloquio Internacional en Creatividad Computacional, realizado en la Unidad Cuajimalpa de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), Ackerman explicó que el proceso es simple: “Alysia procesa textos breves que un sujeto escribe y la máquina asocia sílabas, palabras y frases con notas musicales, además de plantear opciones hasta lograr componer una pieza.
Actúa como un “coautor de las melodías”, con la posibilidad de trabajar en diferentes géneros musicales, desde el pop a óperas, utilizando dos modelos, uno centrado en el tono y el otro en el ritmo.
El sistema innovador que compagina la métrica de la letra con la melodía “no significa que un ser humano escriba textos y apriete botones”. A través del texto escrito, Alysiaposibilita diversas opciones hasta ofrecer una de nuestro agrado, como cuando se compone en colaboración con otro humano.
Ante el rector general de la UAM, doctor Eduardo Peñalosa Castro, en su ponenciaAlgorithmic Songwriting la también cantante especializada en ópera definió su método para hacer música de manera sencilla y accesible para todos.
“Como humanos decimos a la máquina lo que debe buscar, pero no se le indica exactamente lo que debe hacer”, su atención se centra en las notas, en el texto, en las sílabas y las vocales que utilizará para la armonía, “se fija, entre otras características, en lo común que son ciertas palabras para la creación de una melodía”.
Debido a que las posibilidades de expresión y de comunicación entre los humanos son muy diversas y amplias, Alysia fue dotada de funcionalidades co-creativas, a fin de que la vinculación con el sujeto no fuera limitada.
“Es posible requerirle que cambie y ofrezca nuevas tonalidades hasta que presente la que sea de nuestro agrado, que modifique la duración de los tonos y cree una pieza o que muestre melodías semejantes como opciones”.
Si bien la experimentación en música pop y electrónica ha sido común, este sistema ha llamado la atención entre los creadores de temas clásicos por la diversidad de alternativas de colaboración que puede ofrecer. Ejemplo de ello es una ópera creada a partir de un proyecto musical basado en una obra de Giacomo Puccini, la cual dio como origen a Roboccini.
Conjuntamente con el sistema Mexica, ideado por el doctor Rafael Pérez y Pérez, profesor-investigador del Departamento de Tecnología de la Información de la Unidad Cuajimalpa, se creó una historia con un relato largo y coherente sobre narrativas mexicas, esto representó un gran desafío para la inteligencia artificial, porque dio vida a un triángulo amoroso complicado.
En la génesis de la composición musical se respetó todo el texto generado, pero para su interpretación fue necesario usar también un sistema denominado Marley, con lo cual se le agregaron algunas líneas para hacerlo poético y rítmico.
La doctora en Ciencias de la Computación, adscrita al Departamento de Ingeniería en Computación de la Universidad de Santa Clara, California, consideró que su sistema no pretende remplazar la forma tradicional en que se origina la música.
No se busca desaparecer al compositor humano –reconoció– pero sí se analiza el desarrollo de la producción musical, las computadoras serán cada vez más utilizadas, se involucrarán cada vez más en los procesos musicales y Alysia representa una herramienta para facilitar la creación musical, concluyó.
La actividad fue convocada por la División de Ciencias de la Comunicación y Diseño, la Maestría en Diseño, Información y Comunicación y el Grupo interdisciplinario Creatividad Computacional, de la Unidad Cuajimalpa de la UAM.
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