Por: Redacción
A fin de alertar al público sobre los riesgos de las criptomonedas o criptodivisas (monedas digitales), la diputada Ruth Noemí Tiscareño Agoitia (PRI) urgió al Banco de México (Banxico) y a la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), a realizar campañas informativas, debido a su desmesurado uso.
Afirmó que esta herramienta novedosa es producida por una red pública, en lugar de un gobierno, que utiliza la criptografía para asegurarse de que los pagos se envían y reciben de manera confiable durante una transacción comercial. Su uso se ha popularizado en el mundo, mediante aplicaciones electrónicas, desde su aparición hace ocho años; no se sujeta a regulación de ninguna autoridad y tampoco aporta contribuciones o comisiones.
“Hasta el momento no existe en México legislación que regule la compra e intercambio de las criptodivisas, lo que imprime un riesgo todavía mayor al uso de estas herramientas tecnológicas”, destacó en un punto de acuerdo presentado ante la Comisión Permanente.
La moneda digital bitcoin contaba con 81 mil usuarios en México, hasta el mes pasado. El crecimiento ha sido tal, que también se ha incrementado el volumen de operaciones, que alcanzaron más de mil millones de pesos al mes, así como su valor por unidad al cotizarse en alrededor de 48 mil 32 pesos, más del doble del precio del centenario.
Indicó que la Condusef ha expresado que las criptomonedas no están reguladas por las autoridades financieras y todas las operaciones realizadas son irrevocables; por ello, no existe forma de que los usuarios puedan reclamar, si sospechan que son o han sido víctimas de fraude o algún quebranto, por un cambio repentino y abrupto en su valor o la suspensión en su cotización.
“Debido a que no es una moneda oficial, las autoridades no pueden responder por algún quebranto o cambio significativo en su valor e, incluso, en otros países se ha señalado su uso en operaciones ilícitas, como fraude y lavado de dinero”, dio a conocer la Condusef.
El Banxico refiere que hasta ahora, los activos virtuales no han tenido en México una penetración relevante. Sin embargo, ha advertido al público respecto de los riesgos inherentes a la adquisición de éstos y su uso como sucedáneos de los medios de pago convencionales. “El Banco de México no los regula ni supervisa”, dijo la diputada Tiscareño Agoitia.
“En otras jurisdicciones se ha señalado su uso en operaciones ilícitas, incluyendo aquellas relacionadas con fraude y con el lavado de dinero”, según ha considerado el Banco Central.
La legisladora por San Luis Potosí subrayó que ante la falta de regulación, la avidez por construir fortunas rápidas, la facilidad con la que pueden usarse para actividades delincuenciales y su naturaleza volátil, “se hace necesaria una campaña de información más audaz que contribuirá a otorgar mayor certeza al público usuario, aunque sin dejar de lado la libertad que tienen los individuos para contratar de la manera que mejor les plazca”.
Refirió que las criptomonedas adquieren su valor debido a un fenómeno denominado “efecto de red”, en el que los productos y servicios colocados en una red de consumo adquieren mayor valor mientras más personas lo utilizan, es decir, por el número de sus usuarios y la frecuencia con las que las usan”.
Las monedas electrónicas pueden ser adquiridas o intercambiadas por su equivalente en otra moneda, mediante páginas web de la criptomoneda correspondiente o comprándolas en cajeros automáticos.
Actualmente existen diversas criptomonedas, como dogecoin, litecoin y bitcoin. En esta última, el volumen de intercambio llegó hasta 2 millones 860 mil dólares en un día, en el 2011, pero ahora supera los 320 mil millones de dólares en una sesión en los principales mercados.
De hecho, la propia página de bitcoin en español advierte que “el precio es impredecible, puede aumentar o disminuir en un corto período de tiempo debido a su joven economía, su carácter novedoso y en ocasiones mercados ilíquidos”.
“Por lo tanto, mantener sus ahorros en bitcoin no es recomendable. Se debe considerar como un activo de alto riesgo y nunca se debe almacenar dinero y no darse el lujo de perder con esta moneda. Si recibe pagos con bitcoin, muchos proveedores de servicios permiten convertirlos instantáneamente a su moneda local”, señala.
La utilización de las criptomonedas no está exenta de riesgos, debido a que, “desde su origen, fueron relacionadas con actividades ilícitas como el lavado de dinero, el financiamiento de actividades terroristas o la evasión fiscal”. Pero no sólo eso, concluyó la legisladora, sino que su uso implica enormes riesgos para los usuarios.
No Comment