Por: Redacción
En el marco de una gira de trabajo por el estado de Chiapas, en la que estuvo acompañado por el gobernador de la entidad, Manuel Velasco Coello, el secretario de Desarrollo Social, José Antonio Meade, constató que el abasto social en ese estado no se ha visto afectado por las movilizaciones sociales y opera con toda normalidad.
Meade Kuribreña informó que las empresas Diconsa y Liconsa han podido llegar a las comunidades que requieren de los apoyos que se brindan a través de estas dos paraestatales para tener acceso a los productos de la canasta básica.
“Nos dimos cuenta con gusto que estos dos programas fundamentales, de gran importancia, están funcionando con normalidad. Nos regresamos con tranquilidad de que Liconsa y Diconsa están trabajando en favor de los chiapanecos”, sostuvo el responsable de la política social del país.
Después de reunirse con mujeres pescadoras en Tonalá, el titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) y el gobernador Velasco visitaron Tapachula, donde ambos funcionarios anunciaron la inversión de más de 300 millones de pesos para distintos proyectos sociales.
Se trata de un esfuerzo conjunto entre el Gobierno de la República y el gobierno de Chiapas para apoyar los proyectos sociales que permitan mejorar la calidad de vida de las familias chiapanecas.
Ante más de 6 mil personas reunidas en la Feria de Mesoamérica de Tapachula, el gobernador Manuel Velasco y el secretario Meade refrendaron su compromiso por mejorar las condiciones de vida de las comunidades con mayor rezago en la entidad.
Anunciaron la puesta en marcha del Fondo para Fronteras, que en el caso de Chiapas contará con una primera aportación de 45 millones de pesos y que servirá para fortalecer la economía en las regiones del sur del estado.
Ambos funcionarios se reunieron con más de 2 mil mujeres pescadoras a quienes inscribieron al Seguro de Vida para Jefas de Familia de la Sedesol.
La medida fue dada a conocer tras la firma de convenio suscrito entre la Sedesol y el gobierno del estado de Chiapas, y está destinada a aquellas mujeres pescadoras con hijos menores de 24 años, que sean jefas de familia y se encuentren en situación de pobreza o vulnerabilidad.
A través de esta póliza, los jóvenes que desafortunadamente pierdan a sus madres contarán con un seguro que les permitirá proseguir sus estudios hasta el nivel universitario.
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