Por: María Manuela de la Rosa/
El pasado lunes 21 comenzaron los trabajos para la sesión plenaria del 75 aniversario de la ONU. Y para conmemorar este acontecimiento 193 naciones aprobaron una declaratoria que destaca que si bien se han tenido fracasos, se ha promovido la descolonización, la libertad, el desarrollo, los derechos humanos y la igualdad; sin embargo el mundo vive una notable desigualdad, pobreza, hambre, conflictos armados, terrorismo, inseguridad, cambio climático y pandemias; los países subdesarrollados se están quedando atrás, la descolonización no es completa y mucha gente se ve obligada a buscar refugio para escapar del peligro, aunado que este aniversario sucede en medio de una gran pandemia, que no sólo ha traído la muerte y más enfermedades, sino una recesión económica mundial, el incremento de la pobreza, la ansiedad y el miedo. Problemas que deben enfrentarse a través del esfuerzo conjunto mediante el multilateralismo.
Volkan Boskir, presidente de la Asamblea General de la ONU, reconoció que el covid-19 es una crisis que el mundo no había enfrentado desde la creación de este organismo internacional, la cual ha obligado a la participación de todos de manera virtual.
Por su parte Antonio Guterres consideró que la reunión busca un respaldo renovado al multilateralismo en medio de esta pandemia.
Cabe recordar que en plena II Guerra mundial, el 1 de enero de 1942, 26 naciones aprobaron la Declaración de las Naciones Unidas, comprometiéndose a luchar contra las potencias del eje, a partir de lo que el 24 de octubre de ese año, representantes de 50 países se reunieron en San Francisco para redactar la Carta de las Naciones Unidas, misma que fue ratificada por China, Francia, la Unión Soviética, el Reino Unido, Estados Unidos, México y los demás países.
Las autoridades de la ONU estarán presentes, pero los 193 mandatarios de los países integrantes lo harán a distancia y la mayoría de las intervenciones se harán de manera virtual, debido a las medidas para contener la pandemia.
El Consejo de Seguridad, con 15 miembros tardó meses en respaldar el llamamiento de la ONU para un alto al fuego global, a fin de que los países se concentren el resolver el grave problema sanitario global., aunque no fue con consenso, puesto que Estados Unidos e Israel votaron en contra. Y nótese que el país del norte esta a la cabeza de contagios y muertes debido al covid-19.
Asimismo, la ONU hizo un esfuerzo por recaudar 10,300 millones de dólares para luchar contra la pandemia en los países pobres, de lo cual sólo se ha logrado conseguir una cuarta parte.
El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel propuso actuar con audacia y valentía para que las nuevas generaciones tengan mejores oportunidades en el futuro y más allá de los retos de paz y seguridad, hay que considerar la prioridad de la atención al cambio climático y al desarrollo sostenible.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, al referirse a la II Guerra Mundial, señaló que olvidar las lecciones de la historia es irresponsable, lo mismo que los intentos politizados que no se basan en hechos, sino en especulaciones, lo cual consideró un crimen contra los que lucharon contra los nazis. Y no omitió opinar que debe conservarse el derecho de veto de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad. Y propuso enfrentar de manera conjunta la pandemia y los problemas que ha generado, proponiendo concretamente la introducción de corredores verdes libres de guerras comerciales y sanciones.
Sin embargo, el presidente norteamericano decidió no participar y enviar en su representación a la embajadora de Estados Unidos ante la ONU, en un gesto de claro desprecio por el organismo internacional, muy acorde con su muy peculiar falta de diplomacia.
Angela Merkel, canciller alemana pidió una reforma en la ONU a fin de que se amplíe la lista de los miembros permanentes, a fin de reforzar el multilateralismo, iniciativa respaldada por la India, Japón, Brasil y Chile, entre otros países latinoamericanos, propuesta que ha venido planteándose desde hace tiempo y no ha tenido éxito.
Por su parte, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador instó a defender las libertades y a actuar con espíritu de fraternidad, destacando la libertad de expresión, de creencias y el de vivir sin miedo y sin miseria para que verdaderamente se viva en un mundo con justicia. Sin embargo precisamente en México es donde se registra un alto índice de muertes de periodistas, el problema de seguridad sigue sin resolverse y el país se encuentra sumido en una profunda crisis económica, además de ocupar los primeros lugares de contagios y muertes en el mundo, por lo que el reto más grande es tratar de corregir el rumbo con adecuadas políticas públicas que al menos contengan los alarmantes números en cuanto a muertes por covid-19, por violencia extrema y en lo referente al déficit financiero.
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