En entrevista para MUGS Noticias, Juana Ocampo, madre de la ex alcaldesa de Temixco, Gisela Mota, asesinada por Los Rojos en su domicilio el pasado 2 de enero, detalló su lucha por exigir justicia para su hija y cuáles son sus propósitos al frente del movimiento que busca revocar el mandato a la presidenta municipal actual.
Por: Omar Marroquín, enviado.
Temixco, Morelos.- Ha pasado más de un mes desde que un grupo armado asesinó a Gisela Mota Ocampo, la otrora alcaldesa perredista de Temixco, frente a los ojos de su madre. Y lejos de estar paralizada por el dolor y la ira por su pérdida, Juana Ocampo se mantiene estoica y decidida a conseguir justicia para su hija y sus simpatizantes que desde el 19 de enero mantienen un plantón en el Ayuntamiento municipal.
Aunque no puede dar detalles sobre los avances de la Fiscalía General del Estado y la PGR en las investigaciones sobre el móvil del asesinato de su hija –ambas autoridades le solicitaron discreción absoluta–, ella tiene la certeza de que los cinco detenidos que intentaron darse a la fuga luego del ataque son los asesinos de su hija.
“Yo los vi antes de que entraran a la casa. No hay duda de que son ellos. No han confesado, creo que tienen a alguien fuerte detrás porque nos comentan que incluso tienen seguridad interior en el reclusorio” dice impávida sobre la detención los supuestos sicarios del grupo narcotraficante Los Rojos.
Sentada en una banca del auditorio municipal casi vacío, Juana comparte con fluidez la principal sospecha que ella, familiares y sus simpatizantes tienen sobre el móvil del homicidio: el desvío de 200 millones de pesos que la administración del perredista Miguel Ángel Colín heredó al gobierno de Gisela y que ella denunció en su discurso de toma de protesta el 1 de enero.
Actualmente, a petición personal de Juana Ocampo, la denuncia que hizo Gisela Mota en su toma de protesta está siendo investigada como móvil del homicidio por la Fiscalía morelense.
La investigación, sospecha Juana, involucra a un grupo criminal conocido como “El Grupo Taxco” que, según ella, venía casi diario a llevarse dinero de lo que se recaudaba para dirigirlo a cuentas particulares.
“A Gisela el presidente saliente Miguel Ángel Colín le pidió que dejara intactos puestos clave como tesorería, contraloría, obras públicas y secretaría general. Prácticamente él quería todo el control, pero ella se negó. No puedo decir que esto es fundamentado. Tienen que ser las autoridades competentes quienes ratifiquen o deslinden esa información. Yo no puedo hablar de supuestos” aclara Juana.
Desde el pasado 21 de enero la Entidad Superior de Auditoría y Fiscalización del Estado de Morelos (ESAF) inició una auditoría al Ayuntamiento de Temixco debido a que existen indicios que suponen irregularidades en el manejo de las finanzas y dará a conocer los primeros resultados en las próximas semanas.
El proyecto truncado
Todas las noches Juana y su familia regresan a la casa donde la mañana del 2 de enero Los Rojos dispararon sin piedad a su hija, pero los recuerdos de ese lugar no bastan para amedrentarla en su lucha diaria por defender el proyecto municipal de su hija había prometido cada vez que regresa al plantón.
“Yo no quiero ser la presidenta de Temixco. Los medios y la gente maneja mi nombre pero yo no quiero serlo y lo declaro. Yo lo que quiero es que el proyecto de Gisela de lleve a cabo” dice tajante, y prosigue mencionando que parte de las promesas de su hija era llevar el gobierno al pueblo, lo cual consistía en que miembros del cabildo visitaran dos veces a la semana las colonias del municipio para conocer las necesidades de los habitantes.
La creación de empleos con el impulso de un corredor turístico que contemplara la ex hacienda de Temixco y a los artesanos de Coatepec, también formaba parte de los planes de Gisela Mota.
Sin embargo, defender los ideales de Gisela Mota y ejercer presión al actual gobierno de Irma Camacho para que renuncie pronto podría afectar seriamente a Temixco.
El plantón impide periódicamente que los contribuyentes depositen dinero en las cajas de la Dirección de Ingresos. De mantenerse la falta de recaudación fiscal y el pago de otros trámites, algunos servicios públicos municipales –como el pago de nómina, los camiones recolectores, las luminarias, entre otros– podrían dejar de funcionar.
“No quisiéramos que esto estuviera pasando porque a Gisela no le gustaba que a la gente no le llegaran los servicios” admite Juana, pero para ella y los simpatizantes del plantón conseguir la revocación del mandato de Irma Camacho es primordial porque significaría traer nuevas elecciones municipales.
Foto: Oswaldo Rojas
Aunque el Tribunal Electoral Estatal avaló la toma de protesta de Irma Camacho como presidenta legítima de Temixco, seis ex funcionarios del cabildo que fueron destituidos inmediatamente después de iniciar su gobierno –incluida Juana, quien fue nombrada por su hija como presidenta del DIF municipal– desconfían que la concuña del senador Fidel Demédicis respete los ideales de Gisela, quien también se ha negado a dialogar con los miembros del plantón.
El 19 de enero Irma Camacho en su primera sesión de cabildo, sin previo aviso, destituyó a Carlos Caltenco, ex secretario general del ayuntamiento que se opuso públicamente a su toma de protesta, y nombró en su lugar a Raymundo Suastegui.
Además, Camacho cambió a los titulares de la Contraloría, Tesorería y Seguridad municipal que Gisela Mota había nombrado antes de ser asesinada.
“Trabajar con la gente que la profesora quiere imponer es un riesgo para sus vidas porque trae gente que ya estuvo trabajando en la administración anterior. Gente que está metida en los negocios sucios”, advierte.
Juana y los otros miembros del plantón no han discutido la posibilidad de que el fallo del Tribunal sea inapelable. Confían plenamente en que el Congreso local revocará el mandato a Irma Camacho y se muestran listos para enviar una terna que sería elegida por los miembros del plantón.
“Nosotros estamos aquí como grupo, no estamos aquí por un puesto, ni como partido político, sino como un movimiento. En este equipo hay gente intelectual que sí tiene ideas diferentes, no ideas de corrupción” asegura.
Aunque supuestos miembros de Los Rojos fueron quienes asesinaron a Gisela Mota, Juana Ocampo descarta la posibilidad de que el móvil del homicidio de su hija haya sido aceptar el Mando Único en Temixco.
–¿Qué opina de la postura del gobernador Graco Ramírez sobre el móvil del asesinato de su hija que tiene que ver con su rechazo al Mando Único?
-Al principio ella no estaba de acuerdo en aceptar el Mando Único pero luego platicó personalmente con Graco y al final dijo que el esquema era perfectible y que nombraría a una persona de Temixco para que coadyuvara con el Mando único. Le interesaba mucho la policía municipal de proximidad.
–¿Cree que la autoridades harán justicia a su hija?
-Yo espero que sí. Se le ha dado todos los elementos. Debe hacerlo, es una orden que se dio a nivel nacional. Los ojos de otros países están puestos en el caso de Gisela. Espero que no le den carpetazo al caso de Gis. Aún quiero creer en las instituciones.
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