Por: José Manuel Mota Fernández
México terminó con una racha de 12 años de no ganar en Trinidad y Tobago, esto luego de que derrotaron al conjunto trinitario por la mínima diferencia, con el tanto en solitario del defensor del Espanyol, de España, Diego Reyes. Con este resultado, México as afianzó en la cima de la clasificación en el Hexagonal Final de la CONCACAF, con 10 unidades.
El partido comenzó mal para los dirigidos por Juan Carlos Osorio, el funcionamiento del ‘Tri’, de nueva cuenta dejaba mucho que desear, la falta de creación de jugadas de peligro, así como el poco entendimiento entre los ‘Aztecas’, le cedieron la bola al rápido equipo de los ‘Soca Warriors’, mismos que salieron a proponer el partido.
Primero apareció Cordell Cato, delantero del conjunto local, que se sacudió la marca de un zaguero mexicano con una especie de autopase y, una vez dentro del área rival, sacó un disparo con la pierna derecha, esto al 16′. Sin embargo, su disparo no causó incomodidad alguna a Alfredo Talavera, ya que este se fue muy desviado de la cabaña mexicana.
Pasaba el tiempo y México mostraba muy poco a la ofensiva, mientras que a la defensiva, se detenía la mayoría de los intentos del conjunto anfitrión. Fue hasta el 31′, cuando el ‘Titán’, Carlos Salcedo, mandó un centro a segundo poste para el delantero del Benfica, Raúl Jiménez, quien no llegó franco al balón y mandó su cabezazo a un costado de la meta defendida por Jan Williams.
Solamente un minuto después, los fantasmas que perciben a México en esa tierra del caribe se hicieron presentes. Kevin Molino conectó con Jones y luego de controlar, ya dentro de la zona penal, mandó un derechazo que venció a Talavera, el Hasely Crawford Stadium explotó en júbilo por unos segundos, hasta que Legister, central del encuentro, invalidó la acción por un fuera de lugar que no existía.
Ya en la segunda mitad, México salió con los ánimos renovados y solo dos minutos después de haber comenzado la parte complementaria, Héctor Herrera mandó un tiro desde afuera del área que superó a todos los trinitarios pero fue el poste el encargado de rechazar el envío del mediocampista del Porto.
Fue hasta el minuto 59 cuando la mala racha de México se terminó. Luego de un tiro de Layún que fue mandado el tiro de esquina, la bola viajó al centro del área local, lugar en el cual apareció Diego Reyes, mismo que con un cabezazo venció por primera y única vez en la noche a Jan Williams, quien nada pudo hacer ante este testarazo.
El resto del partido fue bien controlado por los visitantes y es que todos los embates de los ‘Warriors’ fue controlado por el muro defensivo de Osorio, mismo que terminaría perdiendo la cabellera después del partido.
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