Por: Risso Alberto
Lo que empezó como un rumor proveniente de un diario flamenco del país belga, comenzó a tomar forma pasada la media noche. Varios medios de comunicación -entre ellos la radio y la televisión públicas- hacían referencia a una inminente cancelación del partido. En un primer momento, la RFEF desconocía en que punto estaba la situación.
Poco después llegaba el comunicado oficial: “Según ha comunicado oficialmente la Federación Belga de Fútbol, el partido Bélgica-España queda suspendido por motivos de seguridad”.
El escenario experimentó un giro de 180 grados tras la última decisión del Gobierno de Bélgica. Tras los atentados que tuvieron lugar en París el viernes pasado y bajo la recomendación del Centro de Crisis, el Ministerio del Interior del citado país determinó que había que elevar la alerta por amenaza terrorista al nivel máximo, es decir, del dos al tres. La consecuencia más directa de esta decisión acarrea la suspensión de todos los espectáculos públicos que reúnan a grandes masas. Evidentemente, el partido entre Bélgica y España entraba dentro de estos parámetros con la nueva alerta.
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