Por: José Manuel Mota Fernández/

Perú y Australia se despidieron de la Copa del Mundo, en un partido que fue dominado por los de Oceanía pero que se definió a favor de los americanos gracias a los contragolpes efectivos del conjunto inca que consiguió dos tantos para irse con tres puntos de este certamen.

La meta australiana era una: ganarle a Perú para esperar el resultado entre Francia y Dinamarca y así, si todo se alineaba, estarían en los octavos de final. Los ‘Socceroos’ tenían que ganar por diferencia de dos y esperar a que los daneses cayeran por tres o más.

Las acciones comenzaron a su favor, la cancha se inclinó en contra de los peruanos, quienes salvaron su puerta una y otra vez, sumado a la falta de puntería de los delanteros australianos, quienes terminaron mandando sus tiros muy lejos de la cabaña rival.

Fue cuando la frase “Gol perdonado, gol en contra” hizo su aparición. Paolo Guerrero apareció por el sector izquierdo del área de los de Oceanía, levantó un centro a los linderos del área grande y desde ahí, con una volea rasante al palo más lejano, André Carrillo adelantó a los peruano que querían despedirse al menos con una victoria.

Luego de esto la tónica del partido fue la misma, solo que ahora, los australianos llegaron a la puerta enemiga con más peligro. Una de las más claras fue un centro raso que alcanzó a cortar la zaga peruana y la otra, un centro a segundo palo que fue rematado por Rogic pero que no tuvo dirección de gol.

La parte complementaria llegó como un balde de agua fría, en especial para los ‘Socceroos’. No habían pasado ni cinco minutos cuando Paolo Guerrero, el referente del cuadro peruano, se encontró la bola dentro del área grande enemiga y, con una media vuelta, puso el 2-0 ante la estirada del meta rival.

El resto del partido fue muy similar a la primera parte, ya que fueron los australianos los que más propusieron al frente, sin embargo, y al igual que en los primeros 45 minutos, no lograron superar a Pedro Gallese, portero peruano, además de que la parte baja de los locales se veía cada vez más frágil.

Fue así como al minuto 81, Paolo Guerrero se quedó a nada de poner el tercero en el partido con un derechazo desde las afueras del área que superó a propios y extraños, pero que terminó rebotando en la base del palo derecho para posteriormente salir de la zona penal.

Francia (C1) y Dinamarca (C2) son los dos equipos clasificados del Grupo C.