Por: Ramón Aguilera
Un nuevo fracaso para la selección de Brasil se consumó este fin de semana con la derrota 1-0 ante Perú que los eliminó de la Copa América Centenario… ¡En la Fase de Grupos!
Y esta derrota toma mayor fuerza cuando el argumento recae en que ‘La Canarinha’ “fue robada” por la mano en el gol peruano, pues ellos NUNCA, JAMÁS han necesitado de una falla arbitral, o anomalía para depender de un triunfo, y menos para usarlo como pretexto. Es por eso que el fracaso toma un tamaño gigantesco.
Y es que en los últimos años, la pregunta obligada para Brasil ya no es cuándo resurgen, sino qué fracaso sigue y es que desde aquel mítico Mundial del 2002, en Corea-Japón, donde fueron imbatibles y campeones, todo se vino abajo.
Aquella selección era un manjar, un deleite a la vista, pues estaba plagada de figuras como Ronaldinho, Rivaldo, Ronaldo, Cafu, Roberto Carlos, entre otros más. Pero fue el último gran destello.
Sí, todavía en la copa América del 2004, a Brasil le alcanzó, con una selección ‘B’, para ser campeón, sin embargo, no sabían que la época de éxitos se quedó ahí.
Fue en el Mundial del 2006 cuando la Verdeamarela, que contaba con un equipazo de época, comenzó con la capa caída. Como amplios favoritos para ser bicampeones, se quedaron en Cuartos de Final al perder ante Francia.
La afición mundial no lo podía creer. De nuevo el fantasma galo se aparecía para quitarles la Copa del Mundo y dejarlos fuera. Ronaldinho, Adriano, Kaka y Ronaldo quedaron con las manos vacías.
No obstante, ahí apareció un nuevo problema al cual la Selección de Brasil no quería afrontar: la falta de un delantero ‘matón’. Sí, Adriano era un toro imparable cuya genética hacía pensar en un Ronaldo mucho más fuerte y potente… pero se quedó en eso, una ilusión pues sus problemas extracancha mermaron su carrera y, de paso, acabaron con el último gran ‘9’ brasileño.
Fue en el Mundial del 2010 cuando se notó más dicha situación, pues eran comandados por Kaka en el mediocampo y no había un punta, ni cerca de igual al clásico artillero carioca, que hiciera daño al frente.
Elementos como Luis Fabiano, Nilmar y Robinho JAMÁS pudieron darle alegría a Brasil, a tal grado que no evitaron la dolorosa derrota en Cuartos de Final ante Holanda… sí, un fracaso más, que le quitaba brillo al famoso ‘Scratch do Ouro’.
Por si fuera poco, cuando las cosas parecía no podían ser peor, llegó el ansiado Mundial Brasil 2014. Todo se miraba en armonía para que La Canarinha resurgiera y, con su gente, lograra levantar su sexta trofeo, pero la realidad fue otra… una inolvidable.
El llanto del mítico ‘Maracanazo’ no fue ni la mitad del derramado en Semifinales del certamen, donde La Verdeamarela se medía con Alemania que no tuvo piedad y los exterminó con un marcador de 1-7, en una de las goleadas más impresionantes… y la humillación más grande del pueblo brasileño.
Ahora, Brasil tiene un par de torneos en la mira: Los Juegos Olímpicos, que a pesar de no ser torneo de mayores representan una gran oportunidad de redimirse y por primera vez colgarse el oro; el otro, el Mundial en Rusia 2018.
A pesar de dos años de espera, las Eliminatorias podrían representar un nuevo fracaso para los sudamericanos, pues con lo mostrado en los últimos años, con selecciones que parecen ‘farsantes’ de la real historia brasileña ya no sería sorpresa quedar fuera por primera vez en su historia de un Mundial.
Se acabaron las preguntas y momentos para saber cuándo resurge de sus cenizas el mítico ‘Scratch’, lamentablemente, ahora sólo podemos decir… Brasil: ¿Qué fracaso sigue?
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