Por: José Manuel Mota Fernández

La fiscalía de la Audiencia Nacional pidió dos años de cárcel para Neymar y una multa económica por irregularidades en el pase de Santos de Brasil al Barcelona, además de que pidió cinco años de prisión para Sandro Rosell, presidente del club catalán y absolvió a Josep Bartomeu por falta de pruebas.

La multa económica consta de 10 millones de euros para el jugador, 8,4 millones para el Barcelona y 7 millones más para el conjunto que debutó al astro brasileño. Además de los dos años de cárcel para el delantero, la fiscalía ordenó un año para su madre, ambos por el delito de corrupción.

Todo comenzó cuando la empresa DIS, que tenía el 40% de los derechos federativos de Neymar cuando jugaba en el Santos, solicitó una condena de cinco años de cárcel para el futbolista ya que considera que hubo una estafa en la transferencia al Barcelona. Además, pidió que el brasileño sea inhabilitado para jugar hasta que no se defina la situación.

DIS también les había apuntado a los padres del crack del Barcelona, a quienes acusa del delito de corrupción y por los que pidió la misma pena que para su hijo. Según la empresa, Neymar y sus padres firmaron dos contratos simulados con Barcelona, cuando los derechos del jugador pertenecían a Santos.

Esta no es la primera vez que un jugador del Barcelona se ve involucrado en un problema de este tipo, ya que Lionel Messi y su padre atravesaron por un problema similar.