Por: Redacción/

Después de 18 años de oficializarse el taekwondo como deporte olímpico, los mexicanos han cosechado siete preseas. María del Rosario Espinoza y Guillermo Pérez Sandoval lograron lo que ningún taekwondoín hizo anteriormente, subir a lo más alto del podio, hazaña histórica que hasta hoy recuerda el deporte mexicano.

El Centro Nacional de Desarrollo de Talentos Deportivos y Alto Rendimiento (CNAR), de la CONADE, se vistió de gala al reunir en sus instalaciones a dos campeones olímpicos en la disciplina de taekwondo, María Espinoza y Guillermo Pérez. Entre abrazos, charlas y entrenamiento, los campeones mundiales recordaron aquel momento en que consiguieron ganar la medalla de oro en Beijin, China 2008.

Guillermo Pérez expresó con emoción que los Juegos Olímpicos en tierras asiáticas, fueron un sueño hecho realidad, en donde aquel 20 de agosto logró consumar su meta como deportista, así como transmitir y compartir ese logro con todos los mexicanos que vivieron el combate junto a él.

A 10 años de aquella proeza, Pérez Sandoval destacó que convertirse en campeón olímpico no fue fácil, pese a no llegar como favorito al encuentro, terminó por conseguir el oro para el taekwondo en la categoría -58 kilogramos.

“El logro transformó mi vida, el no tener ningún reflector y ser un deportista más; cambió al regresar de Juegos Olímpicos, tuve el reconocimiento, auge a todo lo que daba, en la calle la gente me paraba, saludaba y buscaba, para mí no era común, no sabía lo que pasaba y es cuando me cae el veinte de la hazaña que había logrado”, detalló el michoacano.

El ex atleta exhorta a los seleccionados aztecas a crecer día a día para obtener buenos resultados y así mismo brindar más medallas al taekwondo mexicano. Además, comentó que tienen la fortuna de entrenar en el CNAR, quien consideró están en excelentes condiciones para su desarrollo.

Respecto a María, el olímpico se mostró contento por el desempeño que realiza Espinoza para contribuir a favor del taekwondo en México.

“Estoy muy contento con María, por lo que nos ha enseñado estos últimos años, le deseo que siga hasta donde quiera y que lo disfrute, que alcance sus metas, ya que es una atleta con la que muchos estamos agradecidos en nuestra disciplina”, concluyó.

En este día conmemorativo, los medallistas tuvieron la oportunidad de volver a entrenar juntos dentro de las instalaciones del CNAR, momento que para la deportista María del Rosario fue emotivo, ya que recordó el proceso fuerte e intensivo que llevó junto con Guillermo previo a disputar los Juegos Olímpicos.

Para la sinaloense el triunfo de Sandoval fue motivo de inspiración para alcanzar el metal dorado.

“Entrenar juntos me hizo recordar el proceso de preparación que tuvimos rumbo a los olímpicos, fueron pesados y duros, en donde dimos más del 100 por ciento para lograr el objetivo”, finalizó.

El taekwondo llevó a la atleta de alto rendimiento a alcanzar tres medallas olímpicas, mismas que utiliza para alentar a las próximas generaciones a ser perseverantes y esforzarse para alcanzar sus sueños. De igual forma Guillermo, desea transmitir sus conocimientos en su nueva faceta de entrenador en favor del taekwondo mexicano.