Por: César Cuervo

Los Indios de Cleveland se pusieron al frente en la Serie Mundial 1-0 al derrotar por marcador de 6-0 a los Cachorros de Chicago en el diamante del Progressive Field. Corey Kluber se llevó la victoria en el primer juego del Clásico de Otoño frente a uno de los lanzadores estrella de la MLB, Jon Lester. Kluber se convirtió en el primer lanzador dentro de una Serie Mundial que alcanzó los ocho ponches en tres entradas de un encuentro.

El receptor Roberto Pérez, quien conectó dos vuela cercas en el choque, sentenció el duelo en la parte baja de la octava entrada cuando los de Ohio estaban arriba 3-0 todavía. El puertorriqueño prendió con fuerza un picheo del relevista Héctor Rondón y la mandó a las tribunas para su segundo palo de vuelta entera de la noche. El receptor impulsó a Guyer y a Chisenhall, con lo cual su equipo amplió la ventaja a seis carreras.

Anteriormente, en la baja de la cuarta entrada, el mismo Pérez conectó un cuadrangular solitario de línea por el jardín central que se convirtió en el 3-0. El boricua terminó con cuatro carreras producidas y dos Home Runs.

En el arranque del cotejo, los locales empezaron a sacar la diferencia con la que se terminaron por imponer. Francisco Lindor conectó un sencillo y luego se robó la segunda base para ponerse en posición de anotar. Posteriormente, Lester regaló dos pasaportes y las almohadillas se llenaron.

Con la casa llena, el tercera base de los Indians José Ramírez conectó un sencillo al jardín central que impulsó a Lindor hacia el plato para adelantar desde la primera entrada a los comandados por Terry Francona. Después, de nueva cuenta Lester se equivocó y le pegó en la pierna a Guyer con las bases llenas, lo que produjo la carrera de Mike Napoli de “caballito” para el 2-0 parcial.

Jon Lester, lanzador estelar de los Cubs, había lanzado 21 entradas en toda la postemporada y sólo había permitido dos carreras. El día de hoy le hicieron las mismas dos carreras en la primera entrada.

El segundo de la serie es el día de mañana en cancha de los Indios de Cleveland, el Progressive Field.