Por: José Manuel Mota Fernández

El día de ayer, en los octavos de final de la Copa MX, dos jugadores, uno de las Águilas del América y otro más de Toluca, agredieron físicamente a los árbitros de sus respectivos juegos. A pesar de haber existido un contacto, el reglamento solamente lo sanciona como “Agresión a los oficiales del partido”, por lo que su sanción podría ser prolongada.

Enrique Triverio, Toluca le propinó un manotazo en el pecho a Miguel Ángel Flores en una acción donde se expulsó a tres jugadores del cuadro choricero, mientras que Pablo Aguilar, del América, estuvo cerca de propinarle un cabezazo a Fernando Hernández al término del partido, cuando ya sabían que estaban eliminados de este torneo.

“Agredir a los Oficiales y a los Oficiales de Partido por cualquier medio. Un año de suspensión en todas sus funciones y multa de 36 a 450 UMAs”, se lee en el Reglamento de Sanciones emitido por la Federación Mexicana de Futbol el pasado 21 de junio del 2016. La sanción económica iría de $2,700.00 a $26,250 pesos.

En caso de que no los encuentren culpables por agresión, se castigarán por protagonizar “Conducta Violenta”, cuya sanción va de 1 a 3 partidos y multa de 90 a 1000 UMAs. Se espera que la Comisión Disciplinaria resuelva a finales de esta semana y, en caso de encontrarse culpables, podrán regresar a la actividad hasta el próximo ocho de marzo del año entrante.

No podrían participar en ninguna competencia oficial.