Por: Redacción/
La Selección Nacional de Remo hizo historia, al liderar el medallero de la disciplina de remo, en las competencias de Juegos Centroamericanos y del Caribe 2018, con un total de 6 medallas de oro, 4 preseas de plata y una insignia de bronce, logro que por primera vez se alcanza, fuera de nuestro país, en la justa regional.
México superó en el medallero a Cuba, quien quedó en segundo lugar de la tabla general con 5 oros, 5 platas y 1 bronce, algo que sólo ocurrió en los Juegos Centroamericanos de 1990, ambas justas realizadas en la Ciudad de México. Además, ésta es la primera ocasión que México suma seis medallas áureas, fuera de nuestro país, en la justa regional más antigua del mundo.
En la última jornada de competencias de remo, México cerró con tres preseas, en las pruebas que se realizaron en el Embalse del Lago Calima, El Darién, Colombia.
Francisco Gabriel González Median y Adolfo Peralta García se coronaron en la final de dos pares largos, sin timonel, peso ligero, al cronometrar 7 minutos, 09 segundos y 15 centésimas, en los 2 mil metros de la prueba.
La plata fue para Venezuela, con Agustín Betancourt y Luis Orvalles, quienes hicieron un tiempo de 7m15s.26, en tanto que el tercer lugar correspondió a Cuba, con Máximo Arango e Ismael Barceló, con una marca de 7m15s.83
En la segunda final del día, Kenia Vanessa Lechuga Alanís y Maite Arrillaga Garay, conquistaron la medalla plateada, en doble par de remos cortos, con un tiempo de 7 minutos, 23 segundos, 57 centésimas.
Cuba se quedó con el primer sitio, con Aimee Hernández y Yariulvis Cobas, quienes cronometraron 7m20s.29 y las salvadoreñas Adriana Escobar y Jessica Hernández consiguieron el bronce, con 7m42s.19.
En la última prueba del día y de las competencias, Juan Carlos Cabrera Pérez ganó la presea de plata, en un par de remos cortos, con un tiempo de 6 minutos, 59 segundos, 01 centésimas.
El primer lugar fue para el cubano Ángel Fournier, con 6m57s.87, mientras que, el puertorriqueño Joseph Purman obtuvo el bronce, con una marca de 7m18s.22.
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