Por: Luis Fernando Meneses / José Manuel Mota Fernández

América abrió el Clausura 2016 en el Estadio Azteca, recibiendo a la ‘Franja poblana’ en busca de una victoria, sin embargo, ninguno fue capaz de aprovechar las ocasiones a la ofensiva que se les presentaron, decepcionando a los aficionados presentes en el ‘Nido’ tras finalizar con un empate a cero goles.

Los primeros cinco minutos del juego, transcurrieron con aproximaciones en ambos arcos. El primero fue el conjunto de Puebla con un cabezazo que descansó en las manos de Moisés Muñoz.

Posteriormente, tras una buena combinación entre Bendetto, Darwin y Peralta, generaron la primera de peligro para los suyos y que al igual que la jugada de Puebla, no terminaría en las redes.

Al minuto ocho, la visita volvió a incomodar a sus rivales. Después de una serie de rebotes, el disparo de “los camoteros” se estrelló en el poste.

De nueva cuenta, la franja puso peligro en el área de las águilas. Al minuto 18, otro cabezazo por parte del “Chavo” Alustiza se estampó en la humanidad del guardameta americanista.

Fue hasta el minuto 38, cuando América incomodó a los visitantes. Al momento que Benedetto se perfiló para disparar, Patricio Araujo se barrió dentro del área para impedirlo. Acto seguido, los atacantes locales, exigieron al central Jorge Pérez Durán que señalara la pena máxima, ya que, según ellos, el defensor evitó el tiro con la mano. El árbitro, a pesar de los reclamos no lo marcó.

Después de esta acción el peligro no volvió a hacerse presente. Con el marcador empatado a cero, terminó la primera mitad.

Ambas escuadras salieron al complemento con el objetivo en mente de sacar la victoria y mejorar el trámite, pues propusieron muy poco a la ofensiva. Los primeros en saltar a la cancha fueron los ‘Camoteros’.

Apenas corría el minuto dos del segundo tiempo cuando un ambicioso Matías Alustiza quiso adelantar a la ‘Franja,’ Luego de un gran centro desde el terreno de Puebla, sin embargo, lo voló su disparo.

La respuesta del local llegó apenas un par de minutos después luego de que Darwin le filtrara un balón a Oribe Peralta, sin embargo, el ‘Cepillo’ estrelló el balón en el arquero Campestrini.

Al 53’, una gran jugada del Puebla ocurría, confirmando así que el vendaval visitante tenía ahogado al América. Matías Alustiza recibió el balón dentro del área y encaró a un defensor que no opuso resistencia sacó un potente disparo cruzado que fue bien atajado por Muñoz, aunque hubo un contrarremate, nuevamente el meta ‘Águila’ atajó sin inconvenientes.

El conjunto local trataba de responder, sin embargo, no lo hacía con tanta peligrosidad como el adversario. Necesitaba de un atacante que además fungiera en la media cancha para robar balones y construir jugadas, así que Ignacio Ambrz llamó a Michael Arroyo por Quintero, quien salió abucheado.

Los técnicos estaban de pie al filo de sus áreas técnicas, conscientes de la importancia de sumar en este duelo.

Corría el 62’ y con un equipo más ordenado, América tuvo una oportunidad de abrir el marcador con un disparo de tiro libre, mismo que cobró Arroyo sin encontrar suerte, pues su remate fue estrellado en el rostro de Robert Herrera, mismo que se quedó tendido en el terreno por unos segundos.

Al 24’ una oportunidad nueva para América llegó con un tiro libre cerca del banderín de córner. Arroyo disparó a puerta y el arquero poblano desvió, en el contrarremate, el balón se fue por encima.

Después de esta acción hicieron su aparición algunos refuerzos de ambas escuadras. Por Puebla Mauro Cejas ingresó por Alustiza. Mientras que por América hizo lo propio William Da Silva tras la salida de Peralta.

El reloj continuo su curso y el partido fue en declive. Ambos equipos jugaban la cancha horizontalmente, las jugadas de peligro no eran tan abundantes.

Brian Lozano también se presentó ante la afición azulcrema al entrar de cambo por Andrés ‘Rifle’ Andrade, esperando ayudar a su cuadro en el encuentro.

La noche caía en Coapa y con ella se acercaba el final del partido. Llegó el último cuarto del encuentro y parecía que el gol jamás llegaría.

El último cambio del partido ocurrió al 86’, cuando salió José Toledo por Christian Valdés.

La última jugada de peligro llegó al 87’, cuando Darío Benedetto encontró un esférico elevado en el centro del área que recibió con un disparo potente que pasó muy cerca del poste izquierdo del marco defendido por Campestrini.

Algunas apariciones de ambos equipos en las áreas contrarias sin mayor peligro aunadas a una cantidad considerable de faltas fueron la constante en el cierre del compromiso, dividiendo unidades.