Por: Erik Pérez

América sumó la segunda victoria frente a Chivas. Después de eliminar al cuadro tapatio de la Copa a media semana, las Águilas demostraron su calidad futbolística y se impusieron 2-0 en el Estadio Akron. Nicolás Castillo y Andrés Ibargüen fueron los anotadores del partido.

América comenzó a imponer condiciones muy temprano en el partido. Apenas al minuto 3 las Águilas ya estaban ganando con el primer gol de Nico Castillo en el Clásico Nacional. La jugada fue gracias al jugador del partido Renato Ibarra, quien peleó una buena jugada por la derecha y centró al filo del área chica, donde el chileno se adelantó a su marca y remató con la cabeza para romper las redes de las Chivas.

Sin embargo las condiciones de igualdad cambiaron al minuto 36, por la expulsión de Jesús Molina. El mediocampista planchó la parte trasera del tobillo de Paul Aguilar y se ganó la tarjeta directa, con lo que dejó a su equipo con un hombre menos. Desde ese momento la tendencia fue favorable para el equipo visitante que supo aprovechar las oportunidades.

Para el segundo tiempo los cambios de José Saturnino Cardozo comenzaron dar una nueva cara a las Chivas, pero de poco sirvió, pues al minuto 48 comenzó el via crusis para los Rojiblancos. Renato ibarra se metió a base de riñones por la banda derecha y en el último momento antes de que le robaran el balón centró razo. A pesar de lo peligroso, nadie pudo empujar, ni siquiera Andrés Ibargüen quien quedó a medio metro de alcanzar el balón.

No obstante, solo un minuto después el extremo colombiano lavó su error y anotó el segundo tanto del partido para los azulcremas. Gracias a un pase de Nico Castillo quedó solo en la banda izquierda y penetró el área, recortó a su marca y tiró razo para anotar por un lado de Raúl Gudiño, quien ya nada pudo hacer ante el fogonazo.

Con el marcador seguro, un hombre de más y el cansancio reflejado en la cancha, el partido se convirtió en un juego 100% táctico. Solo una genialidad podría cambiar la situación que se vivía, pero esta no se dio. Sin embargo, si hubo una oportunidad de hacerlo. El hombre del partido, Renato Ibarra tuvo un disparo a puerta al minuto 60, pero Gudiño salvó con ambas manos y mandó a córner. El cobro fue bueno y resultó en un nuevo remate de Guido Rodríguez con la cabeza, pero de nuevo el juvenil arquero mandó a tiro de esquina con ambas manos.

Chivas solo tuvo un tiro claro a gol. Este se dio al minuto 90+1, cuando de poco servía. Ronaldo cisneros se filtró en el área y ante Agustín Marchesin quiso tirar por debajo de sus piernas. Desafortunadamente para los locales el tiro no fue lo suficiente poderoso y quedó en los pies del argentino.