Por: Ricardo Lara

Con goles de Álvaro Morata y Gareth Bale y un cuadro con 7 cambios respecto a la alineación de la semana pasada, los merengues ganaron por dos goles al Espanyol en el Santiago Bernabéu para afianzar su liderato, pese a tener dos partidos pendientes en la liga.

Zinedine Zidane aprovechó este partido para dar descanso a su cuadro titular y las novedades no decepcionaron al francés, sin embargo el regreso de Gareth Bale a las canchas tras lesionarse en Lisboa el 22 de noviembre del año pasado.

Los merengues tuvieron un encuentro lleno de oportunidades, la primera cayó por la cabeza de Pepe al 12 que voló su disparo por encima del  larguero, Cristiano tuvo la suya en el primer tiempo pues al 30 sacó un disparo que pudo terminar en el fondo de las redes de no ser por la excelente atajada de Duarte sobre la línea de gol.

El juego del Real Madrid se basó en lanzar centros desde las laterales, lo que tuvo frutos al minuto 33, un pase alto de Isco encontró al español Álvaro Morata que remató de cabeza a la esquina inferior de la portería para vencer a Diego López, que poco pudo hacer ante el buen disparo.

El primer tiempo terminó con los blancos arriba del marcador ante un Espanyol que no encontraba hacerle frente al cuadro alternativo puesto por Zinedine Zidane.

Mas movida fue la segunda parte con un Espanyol buscando empatar el marcador, un disparo al 61 de Hernán Pérez, que Kiko Casilla mandó a córner; Cristiano tuvo la propia en área contraria 8 minutos después cuando mando un cabezazo por encima de la meta.

Ya en la parte final del encuentro,  el gol definitivo llego tras un contragolpe rápido, Isco tomo el balón en tres cuartos de cancha para meter un pase filtrado preciso por la espalda de la zaga del Espanyol que Bale no falo en el mano a mano contra Diego López.

Así los blancos firmaron su excelente paso por la Liga, sumando 52 puntos con 2 partidos pendientes, mientras que los periquitos en la novena posición con 32 puntos.