Por: Redacción/

En línea con el objetivo de promover el ejercicio de los derechos culturales de personas, grupos y comunidades, la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través de Cultura Comunitaria, tiene activos nueve Semilleros creativos en Tlaxcala en el mismo número de municipios, con 223 participantes que desarrollan sus habilidades en artes visuales, coro comunitario, ensamble de percusiones, fotografía, producción audiovisual, títeres o teatro.

En los Semilleros creativos se trabaja con infancias y juventudes que habitan en los diferentes municipios del país, logrando su participación y formación artística como agentes culturales y no únicamente como espectadores; y de esta manera incidir positivamente en su comunidad.

Por poner algunos ejemplos, el Semillero del coro comunitario en Ixtenco participó en el marco del Foro Nacional de Consejos Indígenas en el Museo Nacional de Antropología, interpretando el Himno Nacional en lengua otomí. Por su parte, el Semillero de artes escénicas, de Tenancingo, está invitado a presentarse con una obra teatral original en Nueva York, en el mes de septiembre.

En tanto que, el próximo miércoles 14 de agosto, en las instalaciones de la Secretaría de Cultura, durante la entrega de constancias de Apoyo a la Cultura en Tlaxcala, participarán el Semillero de producción audiovisual de Santa Ana Nopalucan con la proyección de un video documental y el Semillero de fotografía de San Pablo del Monte, expondrá Tlaxcala con luz.

Cultura Comunitaria tiene el objetivo de promover el ejercicio efectivo de los derechos culturales de personas, grupos y comunidades; por ello, a través de su eje Semilleros creativos busca la participación de niñas, niños y jóvenes, mediante grupos permanentes de creación colectiva para construir diálogos creativos y relaciones solidarias en su entorno.

De esta manera, la Dirección General de Vinculación Cultural, encargada de Cultura Comunitaria, trabaja para cumplir el objetivo de la Secretaría de Cultura de fomentar la participación en la vida cultural, poner en el centro de la agenda cultural a las comunidades para no dejar a nadie atrás, así como estimular la imaginación y detonar la creación artística, que permita la construcción de una cultura de paz.