Por: Redacción/
En aplicación de sus tres líneas sustantivas de acción: fomento a la lectura, apoyo a la industria editorial de publicaciones, y el soporte a la creación de jóvenes con el Programa Cultural Tierra Adentro, la Dirección General de Publicaciones (DGP) de la Secretaría de Cultura consolidó programas iniciados en el año 2016, aseguró la titular, Marina Núñez Bespalova.
En el año que termina la DGP realizó 2 mil 641 actividades culturales, incrementándolas en 25 por ciento en comparación con 2016. Impulsó la campaña Abril Mes del Libro, organizó el primer encuentro Puebla, Capital de Lectura, creó el proyecto ¡FILIJ a la vista!, y junto a la Secretaría de la Defensa Nacional desarrolló el programa especial de acercamiento con la lectura para el personal de esa institución, entre otras tareas.
La gestora cultural informó que los programas de fomento a la lectura realizados estuvieron dirigidos a públicos específicos por lo que se atendió a migrantes, poblaciones vulnerables como son las comunidades indígenas apartadas, mujeres en riesgo, jóvenes recluidos en cárceles, jornaleros, trabajadores de maquiladoras.
A fin de desarrollar el Programa de Fomento para el Libro y la Lectura que dirige las acciones impulsadas por la DGP de la Secretaría de Cultura que encabeza María Cristina García Cepeda, cada año se destinan recursos para las 32 entidades federativas a fin de que se utilicen en programas estatales de fomento a la lectura, a través de fondos de fomento a la lectura que tienen carácter mixto.
De los programas enfocados en la creación de nuevos públicos y fomento a la lectura, comentó en entrevista Marina Núñez Bespalova, quizá el principal fue la edición 37 de la Feria Internacional del Libro Infantil y Juvenil (FILIJ), la segunda realizada en el Parque Bicentenario, donde afianzó el interés de los lectores por esta feria en su nueva sede.
Expuso que el cambio de sede de la Feria al norte de la ciudad propició la programación de más actividades, la exhibición de más títulos y a recibir la mayor asistencia en la historia de la FILIJ: 481 mil personas, 13 por ciento más que en 2016.
Comentó que la alta asistencia a la feria da pie a pensar que el evento infantil más importante de la Secretaría de Cultura se está consolidando en el norte de la Ciudad, uno de los propósitos con el cambio de sede. “A partir de esto podemos empezar a hacer programas de apoyo para atraer nuevos públicos, enfocados al libro y a la lectura”.
En esta edición, la FILIJ contó con un espacio de lectura habilitado en colaboración con el estado invitado, Baja California. Con la participación de mediadores, promotores, narradores orales de la entidad, así como escritores y creadores que fortalecieron el programa de actividades, se permitió que alrededor de 14 mil personas tuvieran encuentros significativos con la lectura.
Previo a la realización de la feria en noviembre, en abril arrancó el programa ¡FILIJ a la vista! Con el que se buscó involucrar a los visitantes al Parque Bicentenario y a la gente que habita a sus alrededores en actividades artísticas y de promoción a la lectura. En total se realizaron 17 actividades al que asistieron 2 mil 232 personas.
Sobre el Programa Nacional Salas de Lectura, uno de los esfuerzos más reconocidos que involucra y propicia la participación de voluntarios de la sociedad civil, manifestó la funcionaria, se empezaron a ver los frutos de la credencialización y registro de las diversas salas.
“En esta administración comenzaron a censarse, por lo que sabemos muy bien que hay 3 mil 684 salas de lectura, quién está detrás de cada una, de esa manera tenemos la posibilidad de darles capacitación, acervo y acompañarlos en los distintos escenarios en donde tienen que trabajar”.
Explicó que 2017 fue el año en que se pudo acudir a los distintos voluntarios que conforman las salas de lectura para realizar programas de fomento en diversos espacios de la República Mexicana, justo porque ya se tienen ubicados.
“Sabemos qué perfil tiene cada uno, hay quien trabaja muy bien la frontera, otros en hospitales, entonces ya estamos ubicando los apoyos en fomento a la lectura específicos, y que saben trabajar con determinadas comunidades”.
Dentro del Programa Salas de Lectura se puso en marcha el Programa de Lectura para Niños y Jóvenes migrantes en Baja California, Chihuahua y la Ciudad de México, que plantea que a través de la literatura y con el apoyo fundamental del Libro álbum se brindan servicios culturales a las personas migrantes.
Por otra parte, se dio seguimiento al Programa de Fomento a la Lectura en Escuelas Normales Públicas: Leer para la Vida, con el fin de fortalecer la formación de un magisterio capaz de hacer de la lectura una herramienta para el gozo y el aprendizaje, pero también de enseñanza.
Más de 10 mil personas, entre alumnos, maestros y encargados de bibliotecas, provenientes de 115 escuelas normales públicas concluyeron capacitación en 25 estados del país.
Con la campaña Abril Mes del Libro, se convocó a promotores, mediadores, bibliotecarios, libreros y otros actores culturales a sumarse a un programa de actividades en espacios públicos, propiciando encuentros gratificantes con la palabra oral y escrita.
“Este año, en lugar de hacer una celebración de fin de semana por el Día Nacional del Libro, se decidió realizar Abril Mes del Libro, por lo que se tuvo presencia en parte de la República Mexicana con actividades de promoción de la lectura y lecturas públicas en plazas, mercados y salones de belleza, en donde las personas no esperan toparse con un libro ni con un señor que te hable de libros”.
Marina Núñez puntualizó que para el último domingo del mes, el cual se convirtió en el Día de las Librerías, se contactó a la mayor cantidad de librerías de la República Mexicana que fue posible, a través de la Asociación de Librerías de México (ALMAC), la Red de librerías Educal y el Fondo de Cultura Económica.
Ese último domingo se trabajó en 40 librerías de 21 entidades que abrieron sus puertas para que mediadores de salas de lectura realizaran narraciones orales, lecturas en voz alta, presentaciones de libros y artísticas.
“Lo que queremos es reforzar la imagen de las librerías y creemos eso es algo que se verá reflejado en el 2018. Estos espacios son en la cadena de libro quizá uno de los sectores más debilitados por lo que hay que reforzarlo y verlo no sólo como un espacio de comercialización, sino de promoción lectora.
“Un librero es el promotor por excelencia, cuando tú estas formando un lector puedes ofrecerle la biblioteca, una sala de lectura, pero ya cuando el lector se asume como tal irá a una librería a buscar un libro, por eso es tan importante que exista este tipo de espacios, además de que en ellos se puede hablar con gente que recomiende lecturas y en donde se realizan actividades para todas las edades”.
Añadió Marina Núñez que con esta labor las librerías se pusieron en visibilidad, lo que fue posible con el apoyo de las diversas instancias de cultura de los estados.
“Creo que la campaña Abril Mes del Libro fue exitoso. Lo importante de todo esto es que cerramos con la Noche de los Libros y que pensamos repetirlo en 2018”.
En agosto se realizó el evento Puebla, Capital de Lectura, organizado por la DGP, Educal y con la colaboración del Gobierno de Puebla, en él, confluyeron el Encuentro Nacional de Mediadores de Salas de Lectura, el Congreso de Bibliotecarios, y el Encuentro de Libreros.
En el encuentro se realizó un amplio programa que reunió a cerca de 2 mil 500 personas, entre escritores, conferencistas, mediadores de salas de lectura, bibliotecarios y libreros, entre otros profesionales del fomento a la lectura que intercambiaron experiencias y reflexionaron sobre el quehacer del promotor cultural.
Marina Núñez Bespalova apuntó que este fue un primer esfuerzo realizado para conjuntar a todos los profesionales que acercan el libro a las personas.
“Creímos era conveniente que los mediadores de lectura que están en la DGP, que los bibliotecarios que están en la Dirección General de Bibliotecas, los libreros que están en Educal, así como los promotores que están en cualquiera de los tres ámbitos, se reunieran y platicaran, por eso le llamamos Capital de lectura, porque es el capital que tiene la Secretaría de Cultura para operar y echar a nadar sus programas de fomento a la lectura”.
La funcionaria apuntó que el encuentro no fue riguroso ni académico, sino un espacio en el que se compartieron experiencias, donde conversaron y vieron la manera de trabajar juntos. “Creemos fue un proyecto exitoso con el que quedamos muy satisfechos”.
En marco del Convenio de Colaboración suscrito en julio por la Secretaría de Cultura y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) se desarrolló el programa especial de acercamiento con la lectura para el personal de tropa de cuatro instalaciones militares, uno en Jalisco, uno en Puebla y dos en la Ciudad de México.
“Se echó a andar un programa especial que acercaba la lectura a estudiantes de los espacios de educación que tiene la Sedena. Reconocidos exponentes de la literatura nacional brindaron conferencias con temas de la historia de México para contribuir al reconocimiento de los participantes como lectores y creadores, con el apoyo de talleristas que acompañaron el proceso de construcción de textos propios.
“Este es otro de los programas que empezamos este 2017 y que espero podamos seguir en 2018 porque sí fue bueno y rico”, aseveró.
En los primeros días de septiembre se realizó el segundo Festival Internacional de Novela Negra Huellas del Crimen en el Centro de las Artes de San Luis Potosí, que convocó a 19 escritores de Alemania, Finlandia, Perú, España, Brasil y México, entre los que destacaron los escritores Antti Tuomainen, Stefan Kiesbye, Fernando Ampuero, Marҫal Aquino y Ernesto Mallo.
La doctora en filología hispánica apuntó que uno de los objetivos de este festival es la creación de nuevos públicos. “Empezamos a promover la lectura a través de un género que es muy cercano a los jóvenes y que tiene presencia en otras manifestaciones culturales, como el cine, el cómic, la música, el teatro, la danza, cualquier manifestación que pienses la puedes incluir en el género negro”.
Refirió que la diferencia entre la edición de 2016 con la de 2017 fue que en el programa de actividades no nada más se habló de cine, también de cómics, música y series de televisión, y destacó que los autores extranjeros se sorprendieron del interés que hay en México sobre el género negro. “Incluso hemos apoyado a abrir mercado para la venta o traducción de sus libros”.
Marina Núñez apuntó que en el marco de este festival varios de los autores asistieron a escuelas de nivel medio básico, lo que tuvo una muy buena respuesta. “De hacer una nueva emisión del festival es una actividad que no hay que abandonar, es un camino que ya se comenzó, y que es muy exitoso”.
Otras de las acciones realizadas por la DGP en 2017 fue el lanzamiento de la convocatoria al Premio al Fomento a la Lectura y la Escritura 2017, para conocer, reconocer y difundir las experiencias de promotores y mediadores de lectura. Se recibieron 290 trabajos, entre los que resultaron ganadores promotores de Campeche, Sinaloa, Oaxaca, Yucatán, Estado de México, Sinaloa y Ciudad de México.
En colaboración con el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) se capacitó en fomento a la lectura a 263 adultos mayores, jubilados y pensionados, a efecto de que contribuyan a la formación de comunidades lectoras en sus localidades. Para tal fin se les dotó de un acervo de material bibliográfico con 35 títulos que serán socializados entre los asistentes a sus espacios de lectura.
Durante julio y agosto se convocó a una jornada continua de fomento a la lectura en la que mediadores, promotores y libreros de 19 entidades se sumaron para desarrollar la campaña Un verano de lectura, con la colaboración de las instancias estatales de cultura, la Asociación de Librerías de México, y diversas empresas privadas. Un total de 350 actividades se desarrollaron en espacios comunitarios, con una oferta conformada por: Lectura en voz alta, narración oral, talleres de escritura, ciclos de cine, charlas literarias, cursos de verano, entre otras.
El Programa de Fomento para el Libro y la Lectura se sumó al programa federal: Jornadas Sociales en la frontera sur, convocado por la Secretaría de Gobernación, en el que participan diversas dependencias en la estrategia de atención integral a la frontera sur, para incrementar la capacidad institucional y el desarrollo de los municipios fronterizos y asimismo fortalecer el tejido social para contribuir a la disminución de las carencias sociales de las personas que residen, ingresan o transitan por esa región del país.
Programa Editorial
Marina Núñez señaló que la dirección a su cargo, más que ser una oficina con la función de crear políticas para relacionar el mundo editorial con la entidad pública que representa, es una instancia del libro y la lectura que cuando publica lo que hace es apoyar los distintos programas de fomento a la lectura.
Durante 2017 la DGP publicó 38 títulos impresos en ediciones propias, con un total de 61 mil ejemplares, más dos títulos digitales; en coediciones libres, 10 títulos impresos, más un título digital; y 59 coediciones por convocatoria, con un total de 131 mil 300 ejemplares.
Sobre este último, durante el primer trimestre de 2017 se lanzó la quinta convocatoria de apoyos a la coedición para la industria editorial mexicana, recibiéndose 277 propuestas, entre las que se publicaron 59 títulos en coedición (131 mil 300 ejemplares), en las categorías de narrativa (novela, cuento, relato y microficción), literatura infantil y juvenil, (dos de las cuales son en braille), poesía, ensayo, libros de arte, cómic y novela gráfica, divulgación de la historia de las ideas y de la cultura, libros de teoría y formación para el fomento a la lectura, divulgación científica y literatura testimonial.
“La convocatoria de coediciones nos da pretexto a comenzar a trabajar con libros de inclusión, en braille, en lenguas indígenas, especiales para gente que no tiene la capacidad de leer textos complejos, sobre todo enfocados a niños”.
Se publicaron dos títulos de literatura infantil para personas con discapacidad visual, con un tiraje de 3 mil ejemplares, y cinco obras bilingües, en español y las lenguas purépecha (dos), náhuatl (uno), chatino (uno) y mixe (uno), sumando un tiraje de 9 mil ejemplares.
“Con la ayuda de los editores creo que podemos enriquecer más la visión editorial y tener un trabajo muy profesional detrás que vamos a poner a disposición del público y a un precio más barato, porque parte de la coedición lo que pretende es que el Estado subsidie la producción editorial y el público tenga acceso a ella a un mejor precio”, aseveró Marina Núñez.
Respecto a los 38 títulos propios de la Secretaría de Cultura, estos pertenecen a la colecciones Clásicos para hoy (ocho), Cien (seis), Círculo de Arte (cuatro), Caja chica (tres), Este cuento no ha acabado (tres), Historia ilustrada (tres), Lecturas sobre lecturas (dos), Periodismo cultural (dos), Obras completas (uno), El Centauro (uno), y Práctica mortal (uno), que se suman a dos obras fuera de colección y a un proyecto especial: las Novelas ejemplares de Cervantes ilustradas (tres tomos).
“En 2017 se crearon distintas colecciones de literatura o de libro, enfocados a niños, jóvenes o a primeros lectores. Tenemos Caja Chica que es una colección de libros informativos quizá la primera que se está haciendo aquí en México de manera seria para jóvenes de secundaria, preparatoria y que obviamente la puede leer cualquiera.
“Tenemos también Caja Negra, que son clásicos reinterpretados para actualizar ciertas lecturas. Volvimos a echar andar la colección de Clásicos infantiles, los de gran formato para primeros lectores, para padres que quieren comenzar a leerle a sus hijos, entonces, estamos enfocando toda la batería editorial a apoyar los distintos programas de fomento a la lectura, básicamente, y en 2017 me parece que eso quedó muy claro”, apuntó.
Dentro del Programa Cultural Tierra Adentro, se publicaron 16 títulos, entre ellos los ganadores de los premios nacionales de: Poesía Joven Elías Nandino; de Novela Joven Frontera de Palabras/ Border of Words; de Dramaturgia Joven Gerado Mancebo del Castillo; de Cuento Breve Julio Torri; de Novela Joven José Revueltas y de Novela Gráfica.
A estas obras se suma Cuentistas de Tierra Adentro, 2007-2017, publicado dentro de una colección especialmente diseñada para escuelas normales, de carácter no venal.
“Ahora los premios nacionales no nada más publican, ahora también tiene una agenda promocional, con la idea es que en los años siguientes se vuelvan un atractivo para el circuito comercial editorial, y comiencen a ver cómo es la profesionalización de un escritor.
En ese sentido, ahondó Marina Núñez, se ponen las bases para que Tierra Adentro sea un programa que no sólo fomente la escritura, sino que los escritores participen los programas de fomento a la lectura.
“En los jóvenes hemos encontrado buenos aliados, pues la gran mayoría son personas que viven fuera de la Ciudad de México, conocen su entorno y tienen un ánimo de colaboración comunitaria. Es importante que ellos fomenten la lectura, pero que también la fomentan a través de distintos talleres, sobre ciertas temáticas. En 2018 se verán los resultados de buena parte de esto”.
Respecto a la revista Tierra Adentro, la directora de la DGP señaló que “es una revista que tiene un consejo editorial internacional, que sale de México con el apoyo de la Secretaría de Relaciones Exteriores a las diversas representaciones. Ha pretendido ser un espacio de diálogo entre generaciones diversas, a propósito de ciertos temas que se han puesto sobre la mesa de acuerdo con efemérides, temáticas de actualidad que podrían estar formando parte de una agenda intelectual en el país”.
No Comment