Por: Redacción 

Romanticismo, belleza y misterio se unen en Giselle, uno de los grandes clásicos favoritos del público, que regresa en breve temporada al Palacio de Bellas Artes, a partir de este sábado 27 de agosto.

En el ensayo general abierto al público realizado la tarde de este viernes 26 de agosto por la Compañía Nacional de Danza (CND), los asistentes disfrutaron de los pas de deux, duetos y variaciones del ballet.

Con una coreografía de Jean Coralli y Jules Perrot, la primera bailarina Agustina Galizzi fue la encargada de dar vida a Giselle, una inocente campesina enamorada y correspondida por Albrecht, a quien supone un aldeano, pero que es en realidad un joven noble.

El bailarín Sebastián Vinet, nuevo solista de la Compañía, debutó en el papel de Albrecht.

La primera parte se desarrolla en un ambiente campestre donde el guardabosques Hilarión es el encargado de revelar la verdadera identidad de Albrecht, quien además está comprometido con Bathilde, una mujer de la realeza.

Esta situación provoca la decepción de Giselle, al punto de perder la razón y morir ante la consternación de todos los presentes para luego transformarse en una Wili (espíritu de la novia joven que muere antes de su matrimonio, de acuerdo con una leyenda germánica).

El segundo acto se convierte en el más emblemático y conmovedor al mostrar a uno de los cuerpos de baile más demandantes de técnica y de estilo que sobresale por sus vestidos blancos, las coronas de flores y los gestos de tristeza y pena en medio de un bosque solitario y lúgubre.

La venganza de las willis consiste en hacer bailar a los hombres hasta que mueran a la luz de la luna y a medianoche, por lo que Albrecht tendrá que enfrentarse a ellas hasta que Giselle aparezca para demostrar que el amor es más fuerte que la muerte.

En algunas funciones se contará con la música interpretada en vivo la Orquesta del Teatro de Bellas Artes, con la dirección de Srba Dinic.