Por: Redacción

Por primera vez, la obra literaria de B. Traven llega a un museo enlazada con otras disciplinas, como la fotografía, que también fue su pasión y el cine, toda vez que muchos de sus libros fueron llevados a la pantalla grande, con la exposición B. Traven, la cual se presenta en el Museo de Arte Moderno.

La directora del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), María Cristina García Cepeda, destacó que para la Secretaría de Cultura es un privilegio presentar esta muestra a través de un diálogo entre distintas disciplinas; en este caso para dar cuenta de las diversas facetas de un gran escritor de la primera mitad del siglo XX.

Durante un recorrido para medios, indicó que se trata de una personalidad enigmática, pues siempre escondió su verdadera identidad al huir de Alemania y llegar a nuestro país, donde el escritor le dio gran difusión a ciertos aspectos de la cultura mexicana.

“Propició el conocimiento de ese México profundo; cuando B. Traven llega a nuestro país se fascina por la riqueza y diversidad, entonces no nada más plasma esto en su literatura, sino que empieza a tomar fotografías, en este archivo hay imágenes maravillosas que dan cuenta de esa riqueza indígena, de ese México real, que trasciende las fronteras y hace que se conozca una realidad muy importante de nuestro país, no nada más a través de la literatura y el cine, sino también de la fotografía”.

A través de más de 300 piezas y documentos del archivo personal de B. Traven, que hoy está a resguardo de Malú Montes de Oca, la exposición revela el carácter interdisciplinario del creador, su práctica de explorador y guionista, así como una de sus facetas menos conocidas, la de fotógrafo. Esta es la primera ocasión en que un museo presenta las diversas prácticas artísticas de B. Traven.

La muestra, bajo la curaduría de Natalia de la Rosa, abre con la exhibición de objetos personales del escritor germano-mexicano: un sombrero, su cámara fotográfica, sus botas, máquina de escribir y hasta una máscara mortuoria hecha por Federico Canessi, invitan al espectador a hacer una deconstrucción simbólica del personaje.

Dividida en tres núcleos temáticos, B. Traven presenta primero la juventud del escritor en una Alemania convulsa por la Primera Guerra Mundial, su accidentada llegada a América y su madurez artística en México.

Retratos de Ret Marut, seudónimo que utilizaba el escritor, fotos de sus exploraciones en Chiapas, fragmentos de sus manuscritos, como Puente en la selva y El barco de los muertos, su correspondencia, documentos como su pasaporte, licencia de manejo y números de la publicación anarquista Der Ziegelbrenner, en la que participaba, podrán ser admiradas por el público.

Esta exposición, dijo Sylvia Navarrete, directora del Museo de Arte Moderno, es una invitación al público para redescubrir a un personaje extraordinario y a un creador fuera de lo común, la cual está dirigida a los jóvenes, a fin de que se acerquen y conozcan a este escritor con quien podrán descubrir una parte de la historia de México del siglo XX.

Finalmente, Malú Montes de Oca apuntó que la obra de B. Traven es autobiográfica y en ella los lectores podrán conocer su vida y denuncia social que hizo cuando llegó a México, además de quedar fascinado por el mundo indígena.

B. Traven, que estará abierta hasta el 30 de octubre en el Museo de Arte Moderno, exhibe 75 libros, incluidas primeras ediciones y traducciones; 183 fotografías, 10 manuscritos, 22 objetos personales, 27 revistas y periódicos, así como 17 expedientes.

La muestra incluye un ciclo de cine a partir del 23 de junio en la Cineteca Nacional, el cual se replicará en septiembre en el Centro de Cultura Digital, así como la mesa redonda En busca de B. Traven que se realizará el 21 de junio en la Sala Manuel. M Ponce del Palacio de Bellas Artes.