Por: Redacción/

Kazuo Ishiguro, “quien en sus novelas de gran fuerza emocional ha descubierto el abismo bajo nuestra ilusoria sensación de conexión con el mundo”, se hizo merecedor al Premio Nobel de Literatura 2017.

Roberto Cruz Arzábal, académico de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, comentó que Ishiguro es parte de una generación importante de escritores británicos que comenzaron a publicar en los años 90, y contribuyeron a renovar la narrativa de esa nación.

“Es un escritor con muchos lectores, y sus novelas han sido adaptadas muchas veces a películas; ofrece una dimensión emocional e imaginativa que se agradece en la literatura.

“Suele explorar universos distintos, utópicos, paralelos; formas distintas de pensar la realidad y eso lo ayuda a situarse como un escritor que reflexiona sobre el presente de una forma no obvia”, explicó Cruz Arzábal.

Con novelas como “El gigante enterrado”, “Los restos del día”, “Nunca me abandones”, “Nocturnos” o “Cuando fuimos huérfanos”, el autor cuida sus textos, permitiendo que su obra sea apreciada por una gran variedad de públicos. De hecho, ha sido traducida a más de 40 idiomas.

Kazuo Ishiguro nació en 1954, en Nagasaki, Japón; llegó a Inglaterra en 1960, y en ese país estudió en las universidades de Kent y East Anglia. Pertenece a la generación de escritores como Julian Barnes, Martin Amis, William Boyd, Ian McEwan, Graham Swift y Salman Rushdie, todos considerados hoy referentes de la ficción contemporánea.

“Es un premio merecido, porque hay un estilo muy reconocible en su trabajo, y es lo que premia la Academia Sueca… Es una buena oportunidad para que la gente se acerque a esa generación de autores británicos”, subrayó Cruz Arzábal.

Además del Nobel, Ishiguro ha sido galardonado con premios como el Winifred Holtby, Booker, Cheltenham y Novela Europea Casino de Santiago.

En México sus obras son relativamente fáciles de conseguir, por lo que aquellos que deseen adquirirlas pueden encontrarlas casi en cualquier librería, concluyó.