Por: Redacción
Con la intención de recuperar piezas representativas de su repertorio, la Compañía Nacional de Danza (CND) presentará Velada neoclásica de ballet los días 15, 16, 20 y 23 de octubre en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes.
Se trata de cuatro piezas que de acuerdo con Mario Galizzi, director de la CND, no se deben olvidar, ni permanecer marginadas, al ser repertorio del siglo XX.
La función iniciará con Fragmentarios, del mexicano Carlos López, quien trabajó con el compositor Joaquín López Chas, para crear esta obra sin argumento definida por el propio coreógrafo como “fragmentos musicales-coreográficos de color y luz”.
También se presentará Aguas primaverales, del lituano Assaf Messerer con música de Serguéi Rajmáninov, y Verdi, con música de este compositor romántico italiano y coreografía del cubano Gustavo Herrera.
La obra principal será el ballet Carmen, del cubano Alberto Alonso. El público será la tribuna que acepta o condena y en el ruedo, al igual que el toro y el torero, los personajes antagónicos se entregarán a una lucha de vida o muerte.
La pieza representa la reposición del estreno de este ballet con música de Rodión Shchedrín sobre la original de Georges Bizet, que se llevó a cabo con motivo de la despedida de la primera bailarina Susana Benavides.
Agregó que hay un toque humano que a veces falta en las agrupaciones de nivel internacional. “No quiero ver bailarines perfectos, sino reacciones, emociones”.
Mario Galizzi señaló que no sólo hay que poner en escena ballet clásico como Giselle o El lago de los cisnes. “En el caso de Carmen exige un nivel no sólo técnico, sino también emocional. Es importante que las obras traigan argumentos a los ballets, no sólo los cuentos, que también son importantes”.
En el anuncio también estuvieron los bailarines Ana Elisa Mena, Rodrigo Ortega, Agustina Galizzi, el coreógrafo Carlos López y los maestros de la CND, Tihui Gutiérrez y Raúl Fernández.
No Comment