Por: MUGS/ Redacción
El universo del escultor Javier Marín abrió sus puertas al público en el Antiguo Colegio de San Idelfonso para ofrecer, a través de 48 piezas, un recorrido por su evolución y su reflexión personal acerca de la figura humana como eje de la esencia universal.
Rafael Tovar y de Teresa, presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), afirmó que Javier Marín redimensiona el lenguaje de la escultura contemporánea y ofrece en esta exposición un ejemplo de sus muchas búsquedas estéticas, con cuerpos transfigurados que reinventan la belleza de lo imperfecto en unas piezas y en otras dan cuenta de su belleza y magnificencia.
El titular del Conaculta señaló que el talento de Javier Marín y su búsqueda artística, a través de los más diversos materiales, encuentran en el Antiguo Colegio de San Ildefonso un escenario que retroalimenta su obra, pues en momentos se confunde con el barroco y convive con la belleza de los grandes murales del recinto.
En tanto, Bertha Cea, coordinadora del Antiguo Mandato de San Ildefonso, afirmó que las 48 obras de la producción de los últimos 20 años de Javier Marín son una muestra de la fuerza expresiva del artista y el público podrá encontrar otros matices de su obra alejados de prejuicios “de línea o inspiración”, hallando rasgos amplios de su proceso creativo en el bronce, sus aleaciones orgánicas e inorgánicas, así como otros materiales.
Silvia Zárate, presidenta de la Fundación Javier Marín, recordó que en 1996 la primera gran exposición de este artista fue presentada en el Palacio de Bellas Artes, al construir desde entonces una trayectoria que ha basado su evolución en la metodología profunda y en el trabajo disciplinado, siempre abierto a la experimentación para alcanzar hallazgos.
Por su parte, Eduardo Vázquez, secretario de Cultura del Distrito Federal, comentó que en esta muestra el público podrá encontrar a un artista que es admirado por un gran público y cuya obra acompaña a la gente en el recorrido de la ciudad desde hace varios años; por ello, dijo, Marín vuelve a dejar claro que su visión crea lazos con la gente mediante lo sagrado, lo profano, la tragedia y el espíritu humano.
Finalmente, Ana Elsa Pérez, representante de la Coordinación Cultural de la UNAM, afirmó que esta exposición deja al alcance de los visitantes la obra de un artista que ha enriquecido la tradición artística de nuestro país con la alegoría del cuerpo, proponiendo a través de este elemento el reflejo más simple y a la vez la reflexión más profunda sobre su trascendencia.
Javier Marín. Corpus permanecerá hasta el 20 de marzo de 2016 en el Antiguo Colegio de San Ildefonso. Justo Sierra 16, Centro Histórico.
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