Redacción

A 11 años de su debut en el Palacio de Bellas Artes, el cantante ha consolidado una carrera excepcional

Con una carrera meteórica e impresionante que ha conquistado los escenarios más importantes del mundo, el tenor Javier Camarena para quien la ópera es “un arte que me conmueve, me emociona y no deja de sorprenderme”, celebra 40 años de vida.

Nacido el 26 de marzo de 1976 en Xalapa, Veracruz, la voz de Javier Camarena, de gran expresividad, con una gran facilidad para los sobreagudos y un timbre y color únicos, lo ha convertido en el furor de la ópera a nivel mundial.

El mexicano es el tercer cantante que en los últimos 70 años ha ofrecido un bis en el Metropolitan Opera House de Nueva York, hazaña que también repitió en el Teatro Real de Madrid, siendo el primer tenor en bisar en dos funciones consecutivas en ambas casas de ópera.

Graduado con honores de la licenciatura en música en la Universidad de Guanajuato, Camarena ganó el Concurso Nacional de Canto Carlo Morelli en 2004, año en que debutó en el Palacio de Bellas Artes en el rol estelar de La hija del regimiento de Donizetti. Un año después, obtuvo el primer lugar en el Concurso de Canto Juan Oncinas en Barcelona y en 2006, se integró al International Opernstudio en Zurich.

“Es una carrera meteórica la que está haciendo Javier, una carrera sólida, a pasos duros, que se ha especializado en un repertorio y ha sido muy inteligente en escoger lo que canta y pues ahí están los resultados: una carrera espectacular”, aseguró Enrique Patrón de Rueda, considerado el mejor director de ópera de México.

Quien también apadrinó a Camarena en su debut en Bellas Artes, destacó que el tenor ha sido muy inteligente y se ha especializado en las óperas que nadie canta y él lo hace con una gran maestría, debido a que posee “una voz muy bella, con una extensión admirable, eso es lo que lo está haciendo famoso, su facilidad para los sobreagudos. Es una voz cálida, es una de las voces típicas de México que son tan admiradas en el mundo, con una gran musicalidad y un gran sentido estético a la hora de cantar”.

Por ello, dijo, Javier Camarena ya no es una promesa, “es una gran realidad mundial del mundo de la ópera. Le deseo todo lo mejor, estoy muy orgulloso de él, a mí me tocó apadrinarlo cuando debutó en Bellas Artes, le deseo todo lo mejor, que siga con esa carrera tan brillante y que siga siendo la misma persona tan sencilla y carismática”.

Por su parte, el reconocido crítico musical Juan Antonio Brennan coincidió en que “sin duda, la carrera de Javier Camarena es una de las más interesantes e importantes en lo que se refiere a nuestros cantantes de ópera, los resultados están, no diría que a la vista, están al oído, no son resultados que sólo se avalan aquí en México, sino que están avalados ya de manera muy sólida por la comunidad internacional, ese aval generalizado a la carrera de Javier Camarena es una muestra de que va por muy buen camino y a juzgar por lo que se dice, no solo va por buen camino sino que le queda un muy largo y fructífero camino por recorrer”.

Si bien, dijo, los bises que ha ofrecido llaman mucho la atención, se trata de fenómenos mediáticos que no deben ser la base para calibrar la calidad de Javier Camarena, pues lo importante es “escuchar con atención lo que canta, cómo lo canta y verlo actuar distintos personajes en las óperas que participa, punto. En ese sentido, Javier Camarena está en un altísimo nivel, entre lo mejor que hay en el canto operístico de la actualidad, más allá de los bises que son anecdóticos, son interesantes, pero no está ahí su valor, sino en la calidad impecable de su canto”.

Y es que, destacó, el tenor tiene “una voz absolutamente destacada, es una voz excelente, por su timbre, por su rango, por su expresividad, por el control técnico que Camarena tiene sobre ella, por el dominio de los repertorios que está cantando hasta la fecha”, además de su presencia escénica como personaje de ópera, que lo ha convertido en un cantante muy completo.

Por ello, Juan Antonio Brennan consideró que la agenda de Camarena “debe estar llena hasta por ahí del 2047 en la tarde, porque realmente se lo pelean los mejores teatros del mundo y sin embargo es realmente satisfactorio para nosotros como melómanos, que lo admiramos y supongo que para él como cantante mexicano, el hecho de que se ha estado dando tiempo en estos últimos años de su carrera, que ya está en el candelero, para regresar a México periódicamente y cantar para nosotros, lo que se agradece”.

Finalmente, el director de orquesta Enrique Barrios también reconoció que la de Javier Camarena es “indudablemente una de las carreras más impresionantes de cualquier tenor hoy en día en el mundo operístico y da muchísimo orgullo que un colega mexicano esté teniendo tanto éxito y también da gusto verlo cuidar el repertorio y cuidar no cantar obras que le pudieran afectar en su gran calidad vocal, así que podemos pronosticar, con esa inteligencia que tiene también, una larga y muy productiva y exitosa carrera para mi querido Javier Camarena”.

En el tenor, precisó, la voz y el manejo que de ella hace, son muy especiales, por “el color de su voz que es realmente bello y por otro lado, el repertorio que puede manejar, que es con muchísimas agilidades, con muchos agudos y sobreagudos ya recientemente, esto es un virtuosísimo que es muy apreciado y muy escaso en el mundo actual”.

En Javier Camarena, apuntó, se conjugan un virtuosismo, una calidad ímbrica y una musicalidad tan importante en el manejo estilístico que ha hecho de manera adecuada y culta, que hacen que el tenor hoy en día sea único en el mundo.

Javier_Camarena_ tenor

Enrique Barrios, quien posee el récord de haber trabajado con todos los grandes tenores mexicanos, desde Francisco Araiza hasta Ramón Vargas, advirtió que sería un honor compartir escenario con Javier Camarena.

En el marco de los 40 años del natalicio del tenor, Enrique Barrios no sólo reconoció la importante carrera que ha construido, sino que también, dijo, “se agradece la afable personalidad de Javier Camarena y su ubicación, es una persona inteligente, a la cual no se la ha subido tanto el éxito y eso da mucho gusto”.