Por: Oswaldo Rojas
El palacio de Bellas Artes exhibirá hasta el 4 de octubre la exposición Farabeuf: 50 años de un instante, debido a que el libro cumple cinco décadas de su publicación. Dicha muestra, realizada en colaboración de los familiares del autor y Paulina Lavista; su viuda. Contiene 110 piezas que van de los manuscritos originales, textos y fotografías de referencia hasta audios en voz del autor. Aunque es una pequeña muestra es sin duda útil para el acercamiento y entendimiento de Farabeuf.
“Este año se cumplen los 50 años de la publicación de una novela realmente emblemática, seminal, fundacional dentro de la literatura mexicana que es Farabeuf, que le mereció a Salvador Elizondo el Premio Xavier Villaurrutia. La primera novela que publicó Elizondo, lo que habla de la capacidad de un escritor, increíble, para tener un debut de esta naturaleza, cuyos ecos y resonancias siguen hasta el día de hoy” dijo Mauricio Montiel, coordinador nacional de Literatura del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA).
Farabeuf se trata de un texto – no se puede decir que novela puesto que el propio Elizondo quito dicho adjetivo tras considerar sus características estilísticas – que se volvió referencial para la generación de la Casa del Lago (también llamada generación Destrozada por Humberto Batis). Este grupo de escritores, entre los que se encuentran Juan García Ponce, Vicente Melo, Inés Arredondo, Tomas Segovia y José de la Colina, buscaba una expresión mas cosmopolita de la literatura, este fue el gran contraste que se tenía con los integrantes del boom latinoamericano.
Sus integrantes frecuentaban temas obsesivos: los tabús, la soledad, violencia e incesto. Su finalidad no solo fue una mexicanidad universalista si no también “La Verdad” como línea de meta.
En la opera prima de Salvador Elizondo se aprecian esas características que terminan por diseccionar el instante mismo en que se suceden las cosas, y más importante aún, en el que existe la muerte. Es el suplicio chino – Leng t’ché o muerte por mil cortes – la forma en que encontró dicho instante.
Su búsqueda estilística radicaba en crear una experiencia poética cercana a la verdad, a lo absoluto. “Es una novela que tiene que ver con erotismo, con las formas de creación narrativa que en su momento se necesitaban para transformar a la novela y la literatura mexicana; es una novela que tiene tantas aristas que el público las encontrará a través de la exposición”.
Este mismo año, siguiendo con la conmemoración se presentara, durante la Feria internacional de Guadalajara, una nueva edición que contendrá material de la exposición. Lavista dijo al respecto “(Sera) el manuscrito y el texto en sí, todo lo que se pueda poner para entender la génesis complicadísima de esta novela”.
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