Por: Redacción/

Los ideales y razonamientos de Ernesto Guevara de la Serna, explicados por el mítico guerrillero argentino momentos antes de morir, son expuestos desde un lado humano en la puesta en escena 36 horas cuenta abajo, estrenada este viernes 3 de agosto en el Foro La Gruta del Centro Cultural Helénico.

Bajo la dirección de Otto Minera, esta obra, escrita por José Rivera, quien fue el guionista de la cinta Diarios de Motocicleta, narra las últimas 36 horas de vida del Che Guevara, cuando estaba prisionero en la escuelita del poblado de La Higuera, en Bolivia.

El título original de esta pieza es Escuela de las Américas, la cual está cuidadosamente apegada a los hechos históricos con excepción de los extendidos diálogos entre el Che y Julia Cortés, la maestra de esa escuela, un encuentro que sí se produjo, pero que fue breve.

Enterada del cautiverio del famoso revolucionario en un pueblo que lucha por no morir de hambre, Julia Cortés no pierde la oportunidad de poder reunirse con el Che Guevara, quien buscó desarrollar focos de insurrección en América Latina contra el sistema capitalista como parte de la lucha revolucionaria a nivel mundial.

El encuentro es explosivo: ella, una creyente movida por la curiosidad y el guerrillero herido por el ejército boliviano, quien no quiere que se apiaden de él, pero como la soledad también lo está matando, opta por la compañía.

En la charla, poco a poco, el Che Guevara va develando sus sueños e ideales, sus dudas sobre si escogió la guerra o la guerra lo escogió a él, entre anécdotas de su participación en la Revolución Cubana y su estancia en el Congo.

En esas horas cruciales, Guevara de la Serna tiene la ocasión de hacer un examen profundo de su vida y advierte que debía morir en batalla, porque ahora lo van a ejecutar y a exhibir diciendo que suplicó por su vida.

La derrota, reconoce el guerrillero, es peor que el rostro congelado de la muerte, la humillación total que justamente hace que la muerte en esas condiciones parezca un dulce escape, toda vez que cometió tantos errores como si quisiera que lo atraparan.

Quería el cambio, que la revolución hiciera temblar toda la tierra y escogió Bolivia, un país “desgraciado y jodido”, donde estuvo un año, hasta que lo delataron.

En esas horas finales, el destino del Che Guevara era incierto, pues las autoridades de Estados Unidos lo querían vivo, pero murió en el bucólico villorrio de La Higuera, aún con la esperanza de la revolución triunfante en América Latina.

La puesta en escena 36 horas cuenta abajo ofrece una valoración reflexiva, menos cegada por el brillo del héroe, una mirada indispensable para remontar las persistentes dificultades con que tropiezan una y otra vez los afanes de libertad, justicia e igualdad en el mundo.

La obra cuenta con las actuaciones de los cubanos Juan Valero como el Che y Edgardo González como el sargento Ramos, Carmen Mastache como la maestra Julia Cortés, además de Anilú Pardo, José Aguilar y Alejandro Gama.

Se trata de un proyecto de La Rama de Teatro, En llamas producciones y Funxxión SC, realizado con el estímulo fiscal de Efiartes.

La pieza 36 horas cuenta abajo. Escuela de las Américas se presenta en el Foro La Gruta del Centro Cultural Helénico, Avenida Revolución No. 1500, colonia Guadalupe Inn hasta el 23 de septiembre.

Las funciones son viernes a las 19:00 y 21:00 horas, sábados 18:00 y 20:00 y los domingos 17:00 y 19:00 horas. Los boletos tienen un costo de 350 pesos y se otorga un 50 por ciento de descuento para estudiantes en la presentación de los viernes a las 19:00 horas.