Por: Redacción

La danza encontró en el agua un elemento de sanación para la memoria y la vida: la puesta en escena Entre 6 espacios/entre 6 cuerpos de agua invita a reflexionar sobre el momento crucial por el que atraviesa el vital líquido ante el peligro que constituyen las sequías y la contaminación, fenómenos provocados por el desequilibrio medioambiental ocasionado por los seres humanos en su paso por la Tierra.

En el escenario en el Foro Casa de la Paz de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) eran proyectadas imágenes de ríos y lagos de México, acompañadas de arte sonoro de aguas profundas de los lagos de Texcoco, Chapultepec y Xochimilco, y de los ríos Papaloapan y Yautepec, a cargo de la artista canadiense Magali Babin, mientras tres bailarines contorsionaban el cuerpo en el piso como un fluido de agua para interpretar a Tláloc, dios del agua, y a Chalchiuhtlicue, diosa de los lagos y corrientes de agua.

El propósito de esta videodanza –de la maestra, coreógrafa y videoasta Rocío Becerril– es provocar la reflexión sobre la guerra por el agua, el peligro de extinción del ajolote, el traslado del colosal monolito del pueblo de Coatlinchan al Museo Nacional de Antropología e Historia y, en especial, respecto de la creatividad para hacer una interpretación personal de lo que sucede y se escucha en espacios acuáticos que contienen, guardan y fijan sonidos.

En entrevista la maestra Rocío Becerril narró el proceso creativo que originó esta videodanza, en la que el detonador fue la obra sonora de Magali Babin, cuyo concepto consiste en captar los sonidos acuáticos para ser interpretados con el cuerpo a modo de receptáculos de agua y tejido. Durante el proyecto ambas trabajaron juntas en una escucha interdisciplinaria que las llevó a elegir el título, las imágenes y el método de trabajo.

La maestra Becerril, fundadora de la compañía R+R Arte y Movimiento, sostuvo que dicha compañía “surgió en 1996 en colaboración estrecha y continua con el artista plástico y visual Rodrigo Flores, de ahí Rocío + Rodrigo son una suma de colaboraciones, ideas y propuestas con un permanente acompañamiento audiovisual que ha generado gran empatía”.

De la danza “me nutro a través de la escritura de los cuerpos, tanto de mis alumnos, personas de la calle y los mismos intérpretes en constante acción y contradicción”. El movimiento es infinito así que no hay manera de terminar, incluso muerto el movimiento continúa, las cualidades, las propuestas, los conceptos van cambiando.

Esta obra, por ejemplo, a lo largo de cuatro años ha tenido tres versiones inclinándose cada vez más hacia la filosofía, la política y la ecología, precisó.

Auxiliándose de otras disciplinas como la literatura y la filosofía, la videodanza de la compañía R+R busca ampliar el significado de la danza, ahondando en las raíces de lo audiovisual y el movimiento “tanto Rodrigo como yo abrevamos mucho de la literatura y las imágenes, nos encanta que a través de lo visual se multiplique el movimiento. A veces a partir de una novela, un cuento e incluso una noticia partimos para resignificar un movimiento”.

La compañía R+R ya trabaja en el siguiente proyecto que estará dedicado a la temática de los trenes, que abarcará espacios ferroviarios, vagones, vías y estaciones, “tenemos cerca de tres años persiguiendo el proyecto y por fin nos beneficiaron con una beca de producción del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (FONCA)”.

La idea es hacer 11 videos de danza que se proyectarán al interior de los trenes, acompañados de una instalación escénica corporal muy abierta basada en la literatura, la historia y las imágenes de trenes.

La videodanza Entre 6 espacios/entre 6 cuerpos de agua, organizada por la Coordinación General de Difusión, se presentó hasta el jueves 9 de febrero en el Foro Casa de la Paz de la UAM.