- En el largometraje se retrata el acontecer socio-cultural –entre 2017 y 2018− de niñas y niños de México y Guatemala que forman parte del Ensamble Comunitario Binacional Maya-Chuj.
Por: Redacción/
YIB, largometraje coproducido por el Centro de Capacitación Cinematográfica (CCC) y apoyado por el Sistema Nacional de Fomento Musical (SNFM), resultó ganador en el Festival Cinalfama, de Lisboa, Portugal, en la categoría de mejor película en este 2020. Realizado por Ozan Mermer, novel cineasta de nacionalidad francesa, el filme retrata cómo el poder de la música interviene en la transformación social de una comunidad, así como el papel que juegan tradiciones y raíces culturales en la búsqueda de identidad de cada individuo.
En el largometraje se retrata el acontecer socio-cultural –entre 2017 y 2018− de niñas y niños de México y Guatemala que forman parte del Ensamble Comunitario Binacional Maya-Chuj, uno de las 104 agrupaciones musicales comunitarias coordinadas por el Sistema Nacional de Fomento Musical dentro de la línea de acción de Semilleros creativos del programa Cultura Comunitaria de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México.
Sobre este premio, la secretaria de Cultura del Gobierno de México, Alejandra Frausto Guerrero, comentó la importancia de que a nivel internacional se difunda la diversidad cultural mexicana y qué mejor que a través de una historia como ésta.
“Los Semilleros creativos son grupos de creación en los que participan niñas, niños y jóvenes, donde pueden encontrar una manera de entender el mundo y transformarlo. Este Semillero, además, permite romper fronteras y muestra la diversidad cultural de México, la cual compartimos con nuestros hermanos de Centroamérica”, afirmó.
Aleyda y Alejandra, miembros del ensamble tradicional comunitario, son las protagonistas de esta cinta que expone cómo la música, en tanto lenguaje universal intrínseco en las culturas del mundo, se convierte en elemento fundamental de recuperación y revaloración de su identidad, en este caso la chuj, la cual ha sido negada por años, incluso entre sus miembros.
YIB, palabra que da título a la película, no tiene una traducción precisa, pues aunque fue escuchada por el realizador en múltiples ocasiones durante el montaje, éste nunca encontró un sustento bibliográfico de la misma, que con el paso del tiempo dedujo empíricamente que era una forma de decir “raíz” o “raíces” en maya.
Debido a la contingencia sanitaria a nivel internacional, las proyecciones de las películas seleccionadas en el Festival Cinalfama, de Lisboa, Portugal, se llevaron a cabo en línea y no en el mítico Grupo Sportivo Adicense, casa cultural más antigua del barrio portugués de Alfama, ni en sus muros de piedra como se hacía en 2009, cuando era un incipiente encuentro de cine, que poco a poco se convirtió en un espacio de renombre para los realizadores emergentes.
El reconocimiento a YIB como mejor película 2020 ocurre tras un incesante andar por diversos concursos internacionales, como el Cairo International Film Festival (Egipto), el Baja California International Film Festival y el DocsMX. Y con futuras presentaciones en festivales como el Latinoamericano de Escuelas de Cine “Fernando Birri”, de Argentina; el de Cine Documental Mexicano Zanate, realizado en Colima (México), y el Filméxico – Muestra de Cine Mexicano Contemporáneo 2020 –, en Salt Lake City, Utah, Estados Unidos.
Además del CCC, la Hochschule für Fernsehen und Film MÜNCHEN (Universidad de Televisión y Cine de Münich) participó en esta coproducción fílmica plantea la función que ocupan las tradiciones y raíces culturales en el desarrollo integral de un individuo, en su búsqueda personal y en la construcción de su futuro.
No Comment