Por: Redacción/
Las voces y los corazones de 108 mil personas se unieron en el Zócalo capitalino para rendirle tributo a José José durante un homenaje en el que participaron más de 20 artistas y que cerró después de tres horas con un mega karaoke en el que los asistentes entonaron de manera conmovedora “La nave del olvido”.
El evento ─organizado por el Gobierno de la Ciudad de México, a través de la Secretaría de Cultura capitalina─ abrió la tarde del viernes 25 de octubre con “Una mañana”, a cargo de María León. Su interpretación dio paso al Grupo Mentiras que cantó un popurrí conformado por “O tú o yo”, “No me digas que te vas” y “40 y 20”, para enseguida dar paso a Pandora, trío que hizo gala de su voz con la “Almohada”.
“Estamos muy honradas porque sabemos que desde allá arriba José José está feliz por este festejo tan cariñoso y lindo de todo un pueblo mexicano y se extiende aún más allá de aquí. Muchas gracias por este amor tan profundo, lo que la música hizo en su vida. Gracias por formar parte de este festejo”, dijo Fernanda Meade, integrante de Pandora.
Entre los cantantes más aclamados por el público adulto estuvieron Yuri, Mijares, Dulce y La Sonora Santanera, figuras consolidadas que despidieron al “Príncipe de la Canción” con “El triste”, “Desesperado”, “Gavilán o paloma” y “Amar y querer”, melodías que dieron fama y popularidad a una de las más grandes voces que han dado México e Hispanoamérica.
En opinión de la señora Edith Delgado, “fue un digno homenaje al mejor intérprete del país. Me gustó mucho el espectáculo, todos cantaron muy bien, estuvo muy padre”. Asimismo, para el señor Jesús González, de 78 años de edad, “valió la pena estar aquí desde las 11:00 horas y no me importó mojarme con tal de cantar las canciones de José José con todos los artistas que se presentaron de forma gratuita”, compartió.
El público juvenil aguardó la llegada de Erik Rubín, Kalimba, Natalia Jiménez, Leonel García, Reyli, Paty Cantú y Mon Laferte, quien aprovechó el micrófono para mandarle un mensaje a Chile, su país de origen, desatando muestras de apoyo y cariño por parte de los espectadores que la acompañaron al interpretar “Amar y querer”.
“Como chilanga y chilena, pero sobre todo como una persona más que habita en la región en la que José José dejó un legado tan grande, ofrezco mi solidaridad a todas las personas que se han manifestado en contra de la desigualdad que impide que todas y todos vivamos con bienestar. Hoy, tanto en Chile como en México, necesitamos diálogo, justicia y música”, dijo.
Uno de los momentos más conmovedores fue cuando José Joel y Marisol Sosa, hijos del cantante, quien falleció el pasado 28 de septiembre, subieron al escenario para honrar la memoria de su padre con las melodías “Voy a llenarte” y “Dos”, cuyos temas salieron a la luz en los años ochenta y noventa.
Moenia, Río Roma y Reyli agregaron su característico estilo a los temas de “Volcán”, “Lágrimas” y “Lo pasado, pasado”. En tanto que la banda mexiquese de rock DLD emocionó al público al interpretar el coro “yo he rodado de acá para allá, fui de todo y sin medida”, de la canción “Mi vida”.
Provenientes de Guadalajara, Marina Bosco y Gerardo Mauricio, llegaron a la Plaza de la Constitución para el homenaje-concierto. “Con frío, lluvia y sin comer estamos aquí muy emocionados, disfrutando mucho. Llegamos desde las 14:00 horas y seguimos encantados”, afirmaron.
Luego de corear “Lo que un día fue no será, ya no vuelvas a buscarme, no tengo nada que darte, de tu alpiste me cansé”, a cargo de Napoleón, los espectadores cerraron con broche de oro el espectáculo al prender la luz de sus celulares y cantar en una sola voz “La nave del olvido”, tema con el que intérprete se dio a conocer en México.
“Desde que me enteré que iban a homenajear de esta manera a José José dije que éste no me lo iba a perder. Soy fan de él y acompañada de sus canciones me enamoré. Me siento feliz y muy conmovida”, señaló Lourdes Alzarte.
José Rómulo Sosa Ortiz, mejor conocido como José José, nació el 17 de febrero de 1948 en la Ciudad de México y se consolidó como cantante en la década de los setenta después de su exitosa interpretación de “El triste” en el Festival de la Canción Latina, celebrado en el Teatro Ferrocarrilero de la Ciudad de México.
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