Por: Redacción

Durante más de una hora Calaveras de Azúcar, proyecto musical que integra música tradicional mexicana con rock, norteño, cumbia, punk, jazz y funk, se presentó en la Fonoteca Nacional.

Niños, jóvenes, adultos y personas de la tercera edad escucharon las interpretaciones de esta agrupación que fusiona géneros musicales con el uso de instrumentos tradicionales y modernos.

A las 19:30 la Sala Murray Schafer lucía ya completamente llena, cuando los integrantes de Calaveras de Azúcar enfundados en máscaras y con un vestuario colorido comenzaron el concierto en el que presentaron su reciente producción La bonita, grabado para Nallar Music.

La Bruja, Zandunguísima, La Cumbia Calavera y La Bonita fueron algunos de los temas interpretados por: Érik Calderón, gaitas, flauta, dulzaina, jarana y voz; Emiliano Arandasí, acordeón, jarana y voz; Luigi Rábago, guitarra eléctrica y voz; Sergio Quiñones, bajo eléctrico y voz; y Arturo Fernández, batería y voz.

Originarios de la Ciudad de México, los músicos gracias a su calidad y dominio en sus instrumentos, junto con una dinámica divertida entre sus integrantes contagiaron al público de alegría reuniendo generaciones.

Respecto a su propuesta Arturo Fernández, en entrevista para la Secretaria de Cultura, señaló: “Teníamos la inquietud de empezar a fusionar el folclor de México con música otras partes del mundo encontrando un área de oportunidad interesante, por lo que empezamos experimentar, jugar y probar”.

Vemos la importancia de difundir nuestra música mexicana, pero con otra envoltura más fresca para llegar a otras generaciones, agregó.

En la producción de La Bonita participaron músicos invitados, como Alejandro Flores, ex Café Tacuba (violín huasteco y voz, en el tema La bonita), Tania Melo (vocalista de Los de Abajo en el tema Mira), Chito (arpista de Los Parientes de Playa Vicente en El cascabel) y Pablo Ramírez (clarinetista de la Internacional Sonora Balkanera en La cumbia Calavera).

Junto al acordeón, la gaita asturiana, la jarana, el bajo, la guitarra y la batería los asistentes encontraron composiciones y arreglos frescos por parte del proyecto multidisciplinario que integra elementos musicales y escénicos.